_
_
_
_
_
OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Paracuellos, abandonado

Hace un año me puse en contacto con EL PAÍS quejándome de cómo se gobierna en Paracuellos de Jarama. A día de hoy quiero denunciar lo que para mí es una situación insostenible. Desde hace tres legislaturas gobierna la coalición PP-AIPJ (una agrupación independiente), que ha llevado el municipio puntero (según ellos) a una situación caótica: tenemos una biblioteca cerrada desde hace tres años; la Casa de la Juventud la crearon para cerrarla tres meses después; en muchos lugares hay barrancos que son peligrosos para los más pequeños, por no hablar de los columpios de las áreas infantiles, todos destrozados; la luz eléctrica se va cada dos por tres (especialmente en el sector 1), y el transporte público es de risa.

No existen apenas parques para el esparcimiento de los niños; no pone una estatua que lleva inacabada desde hace más de un año; hay un polideportivo que apenas se usa; las aceras prácticamente no existen y, si existen, los discapacitados no pueden acceder a ellas; el deporte de base (a pesar de ser subsede olímpica) es inexistente y el poco que hay se tiene que autofinanciar; no tenemos Protección Civil, a pesar de decir que está creada y no hay una ambulancia que nos lleve a La Paz en caso de verdadera urgencia.

Tenemos dos fuentes que sólo las vi funcionar cuando vino el señor Ruiz-Gallardón. Y así todo, lo inimaginable pasa en Paracuellos de Jarama.

El señor Zurita (el alcalde) no vive en el municipio, por lo que no es capaz de ver nada de lo que pasa, sólo se acuerda de éste para intentar colocarnos una central térmica o una prisión de menores de la Comunidad de Madrid.

Y ya tocando lo mío, detrás de la calle Real, 36, junto al mesón, hay un descampado que, según el Plan General de Ordenación Urbana, es una zona verde; pues bien, lo único que tiene plantado son furgonetas; llevamos siete años aguantando ruidos, humos y molestias que nos generan éstas; según el Ayuntamiento, no han recibido los terrenos, cosa que los vecinos no nos creemos.

A ver si es capaz de enterarse de una vez por la prensa.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_