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Entrevista:JORGE CASTAÑEDA | Candidato a la presidencia de México en 2006

"Los partidos de México pertenecen al pasado"

Juan Jesús Aznárez

Jorge Castañeda, ex ministro de Exteriores (2000-2003) y candidato, desde el jueves, a la presidencia de México en las generales del año 2006, sostiene en esta entrevista que con las actuales instituciones y partidos no será posible la modernización nacional. "Son partidos del siglo pasado, del México autoritario, del México de economía cerrada, del mundo de la guerra fría. Sería imposible que con estos partidos se pudiera modernizar el país en el siglo XXI", declara.

Castañeda, de 50 años, de perfil socialdemócrata, recibe entre el 6% y el 8% de los votos, según las encuestas, que intentará aumentar hasta el 10% en tres meses. La coyuntura le es propicia, señala el académico, analista y político, porque los últimos escándalos acentuaron el descrédito de los tres grandes grupos políticos, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el gubernamental y conservador Partido de Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), izquierda, sumidos en pleitos internos y corruptelas. "Son los enemigos del México del porvenir", agrega.

México aplica un sistema electoral de una sola vuelta. Castañeda, licenciado por la Universidad de Princeton (EE UU) y doctor en Historia Económica por la Universidad de París, calcula: "Si del 8% que tengo ahora paso al 15% o al 17% y me vuelvo competitivo..., en México se gana la presidencia con el 27% o el 30%". Intentará obtener ese porcentaje con los votos, principalmente, de dos sectores: "Las mujeres y los dos millones de universitarios de México, que tienen una enorme influencia sobre sus familias y sus padres porque, en muchos casos, es la primera generación que va a la universidad".

Pregunta. Tiene una pésima impresión de los tres grandes partidos.

Respuesta. Es la conclusión a la que he llegado yo y la gente en todo México. Han hundido el país en la parálisis. En lo único en que se ponen de acuerdo es en cómo mantener el monopolio, que ya tienen, de la expresión electoral. Pero no pueden ponerse de acuerdo sobre cuestiones fiscales, energéticas, constitucionales, laborales o internacionales. Sobre nada.

P. ¿Podrá con su maquinaria?

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R. No sabemos cuánto ha cambiado el país en estos seis años. En el año 2000, Fox ganó contra el clientelismo del PRI y sin una maquinaria del PAN. Mi apuesta es que México se ha ciudadanizado suficientemente.

P. ¿Por qué decidió disputar la presidencia?

R. Porque es donde mejor y más eficazmente puedo culminar mis 25 años de lucha por los derechos humanos, la democracia y la justicia social. Y por el enorme descrédito en el que han caído los tres grandes partidos.

P. ¿Cuáles son sus propuestas fundamentales?

R. El eje básico, el gran reto del país, es el empleo. No sólo no estamos creando los necesarios, sino que se han perdido 500.000 empleos manufactureros en estos tres años. Necesitamos obra pública, infraestructura, y eso se puede hacer fortaleciendo las finanzas del Estado a través del petróleo, duplicando las exportaciones, y con una reforma fiscal diferente. Pero, sobre todo, creando las condiciones: cambiando el sistema educativo y garantizando la seguridad jurídica para fomentar la inversión privada.

P. ¿Y cómo crear las condiciones políticas?

R. Con las reformas institucionales. Con estas instituciones no es posible, no hay manera de hacer las reformas básicas que se necesitan: reelección de diputados y senadores, referéndum sobre los temas constitucionales, régimen semiparlamentario, con un primer ministro y un jefe de Estado electo por sufragio universal.

P. Es previsible que el sindicalismo, mafioso en algunos gremios, torpedee las reformas. El Gobierno no lo ha tocado.

R. Tengo la impresión de que es uno de los cuestionamientos al Gobierno de Fox. Decidió dejar intacto el viejo sindicalismo mexicano vertical y corporativista en lugar de buscar una verdadera democratización.

P. ¿Quién sufraga su candidatura?

R. Estudiantes, mujeres, jóvenes, por Internet y a través de una cuenta de donativos. También, profesionales, pequeños, medianos y grandes empresarios. Estamos también montando un sistema de contribución por tarjeta de crédito. De todo rendiremos cuentas pública y puntualmente.

P. Cómo han recibido su candidatura los grandes empresarios, los poderes fácticos en México.

R. Yo diría que ha habido receptividad en cuanto a que me conocen, vieron mi actuación en la campaña de Fox y en el Gobierno y en cuanto que concuerdan, en muchos casos, con mis propuestas educativas, sobre seguridad. Entienden que lo esencial es crear empleo y las condiciones para ello.

P. No pocos dicen que no llegará a la presidencia porque, entre otras razones, es güero (blanco y rubio) y soberbio.

R. Yo plantearía que si los que dicen que soy soberbio lo dicen porque soy soberbio o porque tienen diferencias políticas conmigo. No sé si alguien que sea soberbio deja un puesto como el de secretario

de Relaciones Exteriores para dedicarse un año a recorrer el país sin aparato, sin puesto público y sin apenas equipo, con la ayuda de los jóvenes.

El candidato a la presidencia mexicana Jorge Castañeda, en 2001.
El candidato a la presidencia mexicana Jorge Castañeda, en 2001.LUIS MAGÁN

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