_
_
_
_
_

Bruselas aprueba un plan para dar credibilidad a las auditorías en la UE

La rotación será obligatoria y el análisis de cuentas deberá seguir pautas internacionales

La Comisión Europea aprobó ayer un plan para reforzar los controles sobre las auditoras en la Unión y evitar la repetición de casos como el del grupo italiano Parmalat o la cadena de supermercados holandesa Ahold. El objetivo de la medida, que debería entrar en vigor en 2007, es garantizar a inversores y otros agentes la plena fiabilidad de las cuentas auditadas. Entre las novedades introducidas se encuentran las de rotar obligatoriamente a los auditores y la de que los análisis de las cuentas se realicen conforme a los Estándares Internacionales de Auditoría.

Frits Bolkestein, comisario de Mercado Interior, presentó ayer su propuesta como el reforzamiento de una línea de defensa que ha mostrado flancos débiles en los recientes casos de Parmalat y Ahold, donde presuntas situaciones de solvencia financiera enmascaraban un fuerte endeudamiento. "Nadie es tan inocente como para pensar que esta directiva va a acabar con el fraude de un plumazo, pero lo que proponemos inyectará rigor y mayores dosis de ética en el proceso", indicó el comisario tras señalar que el precio de no restaurar urgentemente la confianza será la pérdida de inversiones, empleos y crecimiento económico.

Para proteger la ética, Bruselas propone que las compañías auditadas establezcan un comité de auditoría integrado por miembros no ejecutivos de la compañía en cuestión, uno de los cuales al menos deberá estar versado en los arcanos de la auditoría. Este comité deberá proponer la firma auditora y será el interlocutor de los auditores sin tener que despachar con los responsables directos de la sociedad auditada.

El auditor deberá ser independiente de quienes han preparado los libros de la compañía, pero podrá ofrecer otros servicios (asesoría, jurídicos) a la sociedad que audita. Será ilegal, en cambio, ofrecer auditorías a precio de saldo con vistas a lograr otras concesiones de negocio con sustanciosos márgenes.

En un intento de reforzar la transparencia y evitar connivencias, la Comisión propone que las auditorías sean de carácter rotatorio. Se ofrecen dos posibilidades: cambiar al responsable de la auditoría cada cinco años si la compañía auditada mantiene el trabajo con la misma firma o cambiar de firma auditora a los siete años.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_