_
_
_
_
_
Entrevista:JORDI JULIÀ | Director general de Transportes

"El AVE no estará en Barcelona antes de dos años"

El nuevo director general de Transportes se llama Jordi Julià Sort (Terrassa, 1959) y es ingeniero de caminos por la Politécnica de Cataluña. Llega al cargo tras haber trabajado en Urbanismo y en el Área Metropolitana, de donde pasó a Renfe y, más tarde, a Barcelona Regional, la agencia que realiza proyectos para los municipios del área metropolitana. Cree que en dos años el AVE no llegará a Barcelona y se da por satisfecho si consigue que Cercanías funciones mientras se hacen las obras.

Pregunta. ¿Cómo está en estos momentos la situación ferroviaria en Cataluña?

Respuesta. Es un momento interesante, con cosas tan interesantes y tan polémicas como el tranvía, que es un ferrocarril que está en marcha; la línea 9 de metro, que incrementará en un 50% la red de Barcelona, y es también ferrocarril. Además, con una tecnología muy avanzada, una solución estructural única: un metro automático. Tenemos otras cosas interesantes, como la línea 5 hacia Vall d'Hebron, con una estación tremendamente compleja y honda en el Carmel. Y los Ferrocarrils de la Generalitat. Hay muchos proyectos en marcha, con mucha inversión de la Generalitat.

Las inversiones se han centrado en la alta velocidad y han descuidado Cercanías

P. Y la alta velocidad.

R. Una vez que se han acordado la mayor parte de las soluciones, vemos el momento de ponerlas en marcha en Barcelona, es decir, en los proyectos de la travesía de Barcelona, que es, con diferencia, la parte más compleja del proceso. Si el tren no conseguía entrar en Barcelona, íbamos mal. También se ha adjudicado ya el túnel de La Jonquera, aunque no nos gusta que para nueve kilómetros se haya hecho una concesión privada, con un peaje relativamente elevado. No nos parece justo que en Valladolid haya un túnel de más de 20 kilómetros completamente público y otro para ir a Oviedo de más de 20 kilómetros también gratuito. Nos parece discriminatorio, pero pese a todo debemos congratularnos de que finalmente se ponga en marcha con el año 2009 como máximo. Tenemos que pensar que si en 2009 hay un túnel en los Pirineos, la Administración se verá obligada a que los trenes lleguen.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

P. ¿Es buena fecha el año 2009?

R. Es una fecha razonable, factible.

P. El tren de alta velocidad es un tren extraordinario y, en cambio el de cercanías es un tren ordinario, que preocupa más a la gente.

R. A mí también me preocupa mucho. Es cierto, la política de inversión en los últimos años se ha centrado en la alta velocidad y ha descuidado bastante las inversiones en Cercanías, y esto se nota. Especialmente si el sistema, como tiene éxito, continúa ganando viajeros. Nos encontramos ante un claro déficit de inversión en Cercanías, faltan trenes. Porque en hora punta, todos los trenes de Cercanías que tiene Renfe están circulando y no dan abasto. Renfe ha encargado más trenes. Llegarán dentro de unos meses o dentro de unos años, porque se están construyendo, pero es que llevamos ya un tiempo mal y tampoco estoy seguro de que los que se hacen vayan a ser suficientes. El nuevo Gobierno español, sea quien sea el ministro, deberá cambiar la política de inversiones ferroviarias, no deberá abandonar la alta velocidad, pero tendrá que volver a invertir en Cercanías de una manera contundente y fuerte.

P. Para el Gobierno catalán, la gestión de Cercanías es prioritaria, pero ¿es fácil?

R. Es prioritaria pero no es fácil. Aparte de que tiene problemas técnicos, porque la red ferroviaria española está integrada, no hay una frontera. Pero la transferencia de Cercanías no significa excluir a Renfe. Transferir Cercanías podría significar que se transfiriera el dinero con el que se subvenciona Cercanías, para que la Generalitat decida qué debe hacer. Cercanías Renfe tiene dos clientes: los que compran el billete y el Estado. El importante es el Estado porque, aparte de que es el dueño de la empresa, paga toda la inversión y la mitad del gasto corriente. Si este cliente tan importante que es el Estado transfiere Cercanías a la Generalitat, ésta gestionará el dinero que ahora el Estado destina a Cercanías; pero no estamos hablando de desmontar Renfe, estamos diciendo que la Generalitat reciba el dinero que el Estado destina a Cercanías. En Andalucía lo haría el Gobierno andaluz; en Valencia, el valenciano. Renfe podría continuar siendo el operador.

P. El Gobierno catalán trabaja para que, tras la liberalización ferroviaria, pueda unir con trenes las capitales con Ferrocarrils de la Generalitat.

R. Sería una línea interesante, pero todavía faltan unos 40 años para que esto sea posible y las vías estén puestas.

P. No las del sur. La zona de Lleida, Tarragona y Barcelona teóricamente se podrían unir dentro de un par de años.

R. En un par de años no estará resuelta la entrada a Barcelona. Es demasiado complicada. Me refiero a entrar por el aeropuerto, Sants y la Sagrera. Todo el sistema no se hace en dos años.

P. ¿No se podría hacer únicamente para llegar a Sants o a El Prat?

R. Ya veremos cómo actúan quienes tienen que gestionar la obra.

P. ¿Se atrevería a dar una fecha para que el AVE cruce Barcelona?

R. Lo que sí me atrevería a decir es que en 2009 todo el sistema tiene que funcionar y podrá funcionar si nos ponemos en serio a ello. Y que, de todas estas obras, seguramente las más complejas son las que corresponden al tramo desde El Prat hasta la Sagrera. Esto no significa que esta parte no pueda estar antes, pero es la más compleja.

Lo que preocupa al viajero

P. ¿Se pueden poner fechas a obras como el tranvía y la línea 12?

R. El tranvía del Besòs es la más simple, porque hay menos tráfico, requerirá pocas pruebas. El del Baix Llobregat está funcionando, los tranvías van arriba y abajo, y además razonablemente bien, lo que ocurre es que funcionan con un nivel de incidencias, los pequeños choques que ha habido, que aconseja mantener el periodo de pruebas para ir reduciéndolas, hasta que el sistema sea fiable. Se piensa en unas semanas. A lo mejor no se pondrá en servicio con los horarios definitivos, tal vez al principio tendrán menos servicio del previsto y poco a poco se irá aumentando hasta llegar al servicio definitivo, pero es cosa de semanas.

P. ¿Y la línea 12?

R. En estos momentos hay estudios hechos, pero no hay proyecto ni calendario inversor.

P. En Martorell se da uno de los típicos desencuentros entre administraciones: dos estaciones juntas (Renfe y Ferrocarrils), trabajan por separado y sólo se conectarán mediante una pasarela.

R. Estamos trabajado con el Ayuntamiento de Martorell y con Renfe. La buena noticia es que Renfe tiene previsto invertir en Martorell y nosotros también. La mala es que estos proyectos no estaban coordinados. Ahora intentaremos que se coordinen.

P. ¿Se atreve a describir una situación óptima al final de la legislatura en el ámbito de transportes?

R. Cercanías deberían funcionar como Dios manda, las tenga la Generalitat o el Estado, eso es algo que al viajero no le tiene que preocupar mucho; debe haber una inversión suficiente en Cercanías. Como estaremos en el contexto de las obras de la alta velocidad, yo no espero maravillas. Si estás haciendo obras en una calle, el tráfico pasa mal por ella. Las obras de la alta velocidad son comparables a las obras olímpicas; por lo tanto, dentro de cuatro años con que Cercanías aguante el tipo ya será suficiente.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_