American Standard anuncia una inversión de 24 millones en Sangrá
American Standard, el mayor fabricante mundial de sanitarios y actual propietario de la compañía Sangrá, invertirá 24 millones de euros a lo largo de los próximos tres años en la planta de producción de la centenaria marca en Chiva. Francisco Vilagut, director general de American Standard en España (Ideal Standard), aprovechó una presentación comercial en El Cairo (Egipto) para anunciar una agresiva política de expansión de la empresa en España encaminada a desbancar al fabricante catalán Roca de la posición de privilegio que ocupa en el mercado nacional.
American Standard copó un 18% del mercado español de cerámicas sanitarias con la compra de Sangrá a Uralita hace ahora un año por un total de 7,7 millones de euros.
American Standard dedicará ocho millones de euros al año durante los tres próximos ejercicios para introducir mejoras en la planta. Francisco Vilagut citó como prioridad una mejora de las garantías de seguridad de los trabajadores por encima de los requerimientos legales.
170 trabajadores
Sangrá emplea ahora a 170 trabajadores. Los nuevos propietarios anunciaron el despido de 23 trabajadores aquejados de silicosis. Los despidos se han reducido a 17 ante las demandas particulares formuladas por el resto de empleados afectados. Uralita cerró la venta de la planta con el compromiso formal de ocuparse de los trabajadores aquejados por silicosis, pero los pleitos siguen vivos.
La segunda mejora que American Standard pretende introducir en la planta de Sangrá en Chiva para por aumentar el número de procedimientos robotizados en la manipulación y esmaltado de las piezas de cerámicas sanitarias.
También está prevista la reparación de uno de los dos hornos de cerámica que lleva 27 funcionando sin parar. Según las estimaciones del responsable en España de American Standard, la producción aumentará paulatinamente a partir del mes de mayo, cuando finalicen las mejoras del horno, hasta 750.000 piezas anuales, con una fuerte reducción del número de piezas defectuosas.
La factoría de Chiva tiene pérdidas en la actualidad, aunque la compañía espera situarla en rentabilidad en 2005 aprovechando toda su capacidad productiva. Las piezas se venderán en más de 70 países, ya que el 50% de la producción se exporta, principalmente a Francia, Italia, Grecia, Rusia y otros países del Este.
La planta de Sangrá en Chiva se especializará en las líneas básica y de lujo de la gama de American Standard, que también se fabrican en Francia y el Reino Unido. Pero no producirá las gamas más lujosas.
Las gamas económicas se producen en países con salarios más bajos como Bulgaria, donde sólo se produce grifería, o Egipto, donde American Standard dispone de otra planta de fabricación de cerámicas sanitarias.
