Los Mossos d'Esquadra tendrán una comisaría en cada uno de los 10 distritos de Barcelona

Los Mossos llegarán este año a Barcelona. La consejera de Interior, Montserrat Tura, comunicó ayer al alcalde, Joan Clos, que 700 agentes patrullarán por las calles de la ciudad antes de que termine 2004. También se comprometió a que haya una comisaría en cada uno de los 10 distritos de Barcelona. Mientras, la delegada del Gobierno en Cataluña, Susana Bouis, presentaba el informe sobre delincuencia en 2003. Las cifras señalan una caída de los delitos y faltas del 5,2% en 2003, aunque algunos suben, entre ellos la violencia contra las mujeres, que crece un 12,9%.

Joan Clos dedicó buena parte de la jornada de ayer a los asuntos relacionados con la seguridad. Se reunió con la consejera Montserrat Tura y con la delegada del Gobierno, aprovechando la reunión programada de la junta de seguridad. Sobre la mesa, el despliegue de la policía autonómica en la ciudad: calendario y modo. Acerca de las fechas hubo acuerdo pleno: el despliegue se iniciará este año, con 700 agentes. El resto se incorporará el próximo año, de modo que al terminar 2005 el despliegue se habrá completado.

Excepcionalmente, 300 mossos serán desplazados a la ciudad coincidiendo con las fechas de la celebración del Fòrum de les Cultures. Pero estos agentes no tendrán nada que ver con los que luego se incorporarán a sus destinos definitivos. No obstante, su actuación no se ceñirá al marco del Fòrum, sino que reforzarán la presencia policial en toda la ciudad. Queda por definir el número total de mossos que deben actuar en Barcelona.

Hubo también acuerdo entre Tura y Clos respecto a la conveniencia de que exista una comisaría en cada distrito. El anterior Gobierno catalán había sugerido que era suficiente con cuatro o cinco comisarías y que en el resto de las zonas bastaba con una oficina. Tura y Clos anunciaron ayer que todos los distritos tendrán el mismo tipo de centro. Otro asunto, que ha quedado pendiente porque requiere la intervención de otras administraciones, es la ubicación de estas comisarías.

Montserrat Tura se reunió el martes con el ministro del Interior, Ángel Acebes, y le reclamó la cesión de los cuarteles que ha abandonado el Cuerpo Nacional de Policía o la Guardia Civil, como es el caso de un local en La Rambla y del edificio situado en la calle Navas de Tolosa. Acebes, según Tura, no rechazó la propuesta, pero también es necesario un acuerdo con Patrimonio del Estado, que es el propietario de estas instalaciones. Clos reconoció que será imprescindible construir algunas comisarías si se quiere tener una en cada distrito.

La consejera pretende mostrar con un gesto la importancia que otorga al problema de la seguridad en Barcelona: hasta que se haya realizado el despliegue de los Mossos, Tura participará en las juntas locales de seguridad.

Menos inseguridad

La seguridad ha mejorado en la ciudad, aseguró ayer la delegada del Gobierno, Susana Bouis. Para demostrarlo, ofreció las cifras de delincuencia: 123.141 delitos y faltas en 2003, frente a los 129.922 del año anterior. El descenso se registra en el conjunto y en cada uno de los apartados. Los 60.452 delitos denunciados en 2002 se convirtieron en 55.669 el año pasado, lo que representa una disminución del 7,9%. Las faltas cayeron en menor proporción (2,9%).

Disminuyeron los tirones, los pequeños hurtos y las agresiones y robos a turistas. Fueron desmantelados 56 puntos en los que se vendía droga. Aumenta, en cambio, la violencia contra las mujeres y también el control fronterizo de personas que pretendían entrar en el país sin la documentación en regla.

En total, 49.611 personas que iban a entrar en España por puntos fronterizos situados en Cataluña fueron rechazadas. El pasado año, los visitantes que no fueron autorizados a entrar fueron 28.908. Buena parte de los delitos denunciados están relacionados con atentados contra la propiedad privada: representan el 82,96% de las denuncias presentadas.

El informe policial destaca la mayor coordinación entre la policía y la Guardia Urbana como una de las causas de la reducción de la delincuencia. Un segundo factor es el aumento de los ingresos en prisión debidos a las nuevas leyes. Pero el triunfalismo de los representantes del Gobierno del PP tuvo su contrapunto en la intervención del alcalde Barcelona. Clos explicó que "la situación delictiva es ahora más crispada" y alertó sobre el colapso que se está produciendo a causa de los juicios rápidos, que ha hecho que se haya bloqueado la ejecución de sentencias.