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El Puerto de Barcelona excluye a Clos en un acto que preside Mas

El presidente de la entidad, Joaquim Tosas, fue nombrado por la Generalitat

El portavoz del gobierno municipal de Barcelona, Ferran Mascarell, acusó ayer al Puerto de Barcelona de "manipulación electoralista" de los actos de inauguración de un paseo y una escultura previstos para hoy en el puerto barcelonés, al no haber programado en ellos la participación del alcalde, Joan Clos, pero sí la del conseller en cap de la Generalitat, Artur Mas, que además preside las inauguraciones.

Mascarell afirmó ayer que "el Puerto actúa con prepotencia, desconsideración y menosprecio hacia la ciudad". El portavoz dejó claro el malestar que la exclusión ha desencadenado en el gobierno municipal "por las maneras que se han seguido", según precisó el Ayuntamiento en un comunicado. Esas maneras han consistido en remitir tres cartas de invitación, a Clos; al primer teniente de alcalde, Xavier Casas, y a la concejal Maravillas Rojo -miembros del Consejo de Administración del Puerto-, en las que se comunica la celebración del acto, del que se excluye al alcalde, algo anormal puesto que la participación de Clos (o Casas) en las frecuentes inauguraciones del puerto es habitual. De hecho, muchos de esos actos son organizados de forma conjunta por el Puerto y el Ayuntamiento barcelonés.

Hoy se inaugurará la nueva urbanización del Moll de Sant Bertran, que supone la apertura del paseo del rompeolas, además de la presentación de la escultura Ones, de Andreu Alfaro. En los actos organizados para estas inauguraciones, está previsto que pronuncien sendos discursos Artur Mas; el presidente del Puerto de Barcelona, Joaquim Tosas -ex director de Carreteras de la Generalitat y nombrado director del Puerto por el Gobierno catalán en junio de 1996-, y el escultor Andreu Alfaro, pero no el alcalde Joan Clos.

El consistorio considera que esa exclusión es una manipulación electoralista. Mascarell denunció que además supone "menosprecio hacia la ciudad" por parte del Puerto y "desconsideración hacia el alcalde, a quien no se ha dado el papel institucional que le corresponde, algo especialmente grave teniendo en cuenta que se inaugura una escultura que simboliza la puerta entre el puerto y la ciudad". "Lamentamos mucho que el Puerto se someta a la lógica electoralista del momento", insistió Mascarell, quien expresó su deseo de que la autoridad portuaria de Barcelona "recupere el sentido correcto de sus relaciones con la ciudad".

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