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Numerosas denuncias por engaño contra agencias de alquiler de pisos en Barcelona

Entre 60 y 140 reclamaciones se presentan cada mes ante las oficinas del consumidor

Entre 60 y 140 personas han denunciado cada mes desde principios de año ante organismos de defensa de los consumidores haber sido objeto de engaño por parte de agencias de alquiler de pisos en la ciudad de Barcelona. Muchas de ellas denuncian haber pagado cantidades que llegan hasta 220 euros por un servicio de ayuda para alquilar una vivienda que no ha sido tal. El servicio se limitaba, en la mayoría de los casos, a facilitar al cliente una lista de pisos, a veces simplemente copiados de los anuncios de prensa, que en muchas ocasiones estaban ya alquilados.

"CLOT. Piso 2 habitaciones, 1 baño, comedor, cocina equipada, exterior. Listo para vivir. 241 euros por mes". El anuncio parece irresistible, a un precio considerablemente más bajo que el habitual en el mercado. Pero esta oferta ni siquiera existe. Se trata de un "gancho" para atraer clientes desprevenidos: al llamar al teléfono indicado, el usuario será invitado a pasar por las oficinas de una empresa. Una empresa que le cobrará más de 200 euros simplemente por facilitarle un listado de supuestos pisos en alquiler, muchos de los cuales ya estarán ocupados. Éste es el denominador común de la mayor parte de las denuncias presentadas por personas que quieren alquilar un piso.

A comienzos de este año, entre enero y abril, la Federación de Usuarios y Consumidores (Fuci) recibió un promedio de 140 reclamaciones mensuales en Barcelona, frente a 700 en el resto de España. En los últimos meses el número de denuncias se ha reducido y oscila alrededor de las 60 mensuales. Según Gustavo Samayoa, responsable de vivienda de Fuci, este descenso se debe a las campañas de información que han alertado a los usuarios contra este tipo de fraudes, del que son víctimas en muchos casos trabajadores inmigrantes o estudiantes.

Samayoa recomienda que, antes de pagar, el usuario tenga claro cuál es el servicio que contrata. "Que le digan qué cantidad de pisos van a pasarle y qué tipo de información. Si firma sin controlar lo que le van a dar, luego no podrá reclamar", afirma. En general estas empresas están legalmente constituidas "pero lo que hacen ya no es tan legal", aclara Samayoa. En Barcelona existen por lo menos 10 agencias que se dedican a suministrar información de pisos en alquiler. Una de las maneras de publicitarse es a través de avisos con precios bajos donde las empresas simulan ser particulares.

La otra estrategia para atrapar clientes es publicar grandes anuncios en las páginas de clasificados. "¡Pisos sin comisiones!", avisa una agencia, ubicada en Via Laietana. "¿Necesitas vivienda en alquiler en Barcelona? De particular a particular", dice otro anuncio, en este caso de la agencia Home Info, que tiene su sede en la calle de Provenza, 286, y que hasta hace poco tiempo tenía otro local en la de Pelai, 11, que ha cerrado. El anuncio no aclara, obviamente, que entre los dos particulares existe un intermediario: la propia oficina.

Pagar y esperar

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Alyssa Golderos, estudiante de Puerto Rico de 26 años, es una de las personas que ha presentado reclamación. Llegó a Barcelona en junio del año pasado y pensó que encontrar un piso sería tarea fácil. Llamó al anuncio de Home Info creyendo que era un particular. "¿Cuál es su nombre? Pase por Pelai, 11", le dijeron. Una vez en la oficina, aunque contrariada por no tratarse de un particular, Golderos decidió de todos modos pagar por los servicios de Home Info. La agencia le dio una lista de 20 pisos. Pero muchos ya estaban alquilados, "algunos desde hacía tiempo", recuerda. "En otros no me querían alquilar porque soy latinoamericana", explica.

Golderos buscó vivienda durante tres semanas, sin obtener resultados. Se quejó ante la agencia, pero ésta no se responsabilizó de su problema ni le devolvió el dinero. "Nosotros no podemos garantizar que todos encuentren piso", le respondieron. Este diario pudo comprobar hace unas semanas que la agencia asegura a los clientes que si en seis meses no han conseguido piso gracias a su servicio, se les devuelve el 80% de lo que han abonado.Ante la pregunta de qué sucede si no se consigue piso, Rocío -una de las dependientas de la empresa Centro Newuep- responde a los clientes: "Mi experiencia dice que en muy pocos días se consigue piso. En muy pocos días". La experiencia de Juan Ruiz, también de 26 años, no dice lo mismo. Ruiz llegó a Barcelona desde Alicante en octubre, para realizar un curso de posgrado en Periodismo. Una amiga le recomendó que fuera a Centro Newuep, ubicada en la calle de Pelai, 50.

Las instalaciones de la empresa constan de dos salas casi vacías, con un ordenador en cada una, una fotocopiadora, algunas revistas y un horno microondas. Ruiz pagó 160 euros y recibió a cambio seis teléfonos, pero no le sirvió ninguno. Le dieron más y tampoco obtuvo resultados. Pasaron 15 días y el estudiante comenzó a inquietarse: "Decidí ir a las oficinas y exigirles lo que me correspondía", recuerda. Tras amenazarles con presentar denuncia, obtuvo un nuevo listado de pisos, y esta vez sí que logró alquilar uno. El mismo día.

Joaquín Tórrez es un estudiante nicaragüense que también pasó una odisea antes de llegar a buen puerto. Pagó 220 euros por los servicios de la agencia Centro de la Vivienda 2000, ubicada en la Rambla de Catalunya. A Tórrez le convenció el hecho de que la empresa estuviera adherida a la Junta Arbitral de Consumo de la Generalitat. Esto, en realidad, se repite en casi todas los casos y no garantiza nada: sólo indica que la agencia está autorizada a brindar información, en este caso teléfonos de pisos en alquiler.

Tórrez recibió 12 teléfonos, pero algunos eran pisos sin muebles, y otros ya estaban alquilados. "La información estaba muy desfasada. Gasté un dineral en llamadas telefónicas", recuerda. El contrato que había firmado el estudiante, sin embargo, decía que "la empresa no es responsable de que el cliente no encuentre una oferta que le interese". Pero, al final, Tórrez lo consiguió: casi un mes después del primer intento, pudo alquilar.

Dos agencias multadas

Éstos no son casos aislados: a comienzos de este año la Dirección General del Consumo sancionó a dos agencias. La empresa de Enrique Nieto García debió pagar 6.000 euros por publicidad engañosa, por incumplir la prestación de un servicio de calidad y por dar información que no correspondía con ninguna realidad probada. Senna-R SL pagó 3.600 euros por ofrecer información falsa y sin actualizar.

La falta de oferta de pisos de alquiler y el hecho de que Barcelona atraiga cada año a miles d estudiantes extranjeros hace que haya una gran desproporción entre la oferta y la demanda de pisos de alquiler. Ello ha originado un espectacular aumento de los precios en los últimos años y un endurecimiento de las garantías exigidas por los propietarios. La dificultad de encontrar un piso ha encarecido los trámites hasta el punto de que muchos aspirantes pagan incluso por obtener información.

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