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El alcalde de Calella investiga la paliza de un policía local a un joven danés

Un vídeo muestra cómo el agente propina 28 golpes de porra al turista

El Ayuntamiento de Calella investiga la responsabilidad de un cabo de la Policía Local en la agresión a un joven danés en un hotel del municipio. Un amigo de la víctima registró la escena en un vídeo y ésta fue difundida el miércoles por una televisión danesa. En las imágenes se ve al policía golpeando repetidamente al joven con una porra. El alcalde, Josep Basart, de Esquerra Republicana, responsabilizó de este tipo de incidentes a los operadores turísticos, que promocionan Calella como un destino de juerga y alcohol.

A pesar de que ni la víctima ni el hotel han presentado denuncia por el caso, la difusión de estas imágenes ha causado conmoción en Calella. Entre los turistas que cada verano invaden el municipio se cuentan también los procedentes de Dinamarca, por lo que la mala imagen que puede dar el vídeo no deja de preocupar. Basart ha declinado opinar sobre la actuación del cabo, que sigue de servicio, hasta disponer de un informe, pero ha recordado que situaciones de violencia como ésta son habituales en Calella. "Cada semana tenemos casos de vandalismo y gamberrismo de los que son responsables jóvenes daneses", asegura Basart.

Según el alcalde, grupos de turistas de esta nacionalidad contratan estancias de una semana en Calella basadas en el consumo de alcohol sin límites y la permisividad sexual. Precisamente esta semana, durante la presentación de una campaña turística, Basart denunciaba esta situación. "Estas agencias prometen a los jóvenes que podrán beber hasta que el cuerpo aguante", afirmó Basart, que también culpó a los empresarios hoteleros, "a los que les importa un pepino que los jóvenes acaben con un coma etílico en la puerta de su hotel".

Los hechos difundidos en el vídeo ocurrieron el 6 de julio en el hotel Olympic de Calella. Los Mossos fueron alertados de que un joven estaba destrozando parte del mobiliario e intimidando a otros huéspedes. Tres agentes autonómicos y un cabo de la Policía Local se personaron en el lugar y encontraron a Mikkel Aaquist J., de 18 años, en la piscina del hotel en un estado visiblemente alterado, informaron fuentes policiales. Dos de los mossos resultaron heridos cuando trataban de reducir al joven, que era de complexión fuerte. Fue entonces cuando el cabo se abalanzó sobre él y le asestó 28 golpes con la porra. El turista danés ingresó en el hospital de Sant Jaume de Calella y fue trasladado posteriormente a la unidad de psiquiatría del hospital de Mataró.

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