_
_
_
_
_

Esquerra ofrece al PSC y CiU un pacto tripartito en Berga

La jugada de Convergència i Unió (CiU) de otorgar a Esquerra Republicana (ERC) la alcaldía de Berga para evitar que la obtuviesen los socialistas ha dejado el Ayuntamiento en un callejón sin salida hasta que se produzca una renegociación entre todas las formaciones y ha provocado un clima de indignación, al menos entre la mitad de la ciudadanía, que considera legítimo que el partido ganador, el Partit dels Socialistes (PSC), acceda al gobierno municipal.

El flamante alcalde republicano, Josep Xoy, lanzó ayer una nueva propuesta para formar un gobierno de unidad en el que participasen tres concejales de cada grupo, excepto el representante del PP. El PSC rechazó de inmediato la iniciativa y desde CiU se calificó de "innecesaria". El anterior alcalde, el convergente Josep Maria Badia, responsable de la votación del sábado, argumentó que con su decisión pretendió forzar un pacto con ERC, pero precisó que su grupo no renuncia a la alcaldía aunque sea de forma compartida.

Xoy ya avanzó ayer que si el pacto de tres no es posible, intentará un acuerdo por separado con los socialistas o con los convergentes, pero siempre bajo la condición de que continúe como alcalde. Una actitud paradójica, ya que Xoy mantuvo que no quería ser alcalde debido a los malos resultados que obtuvo Esquerra.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_