El PSE rechaza readmitir a los expulsados de Sestao pese al último fallo judicial
El PSE seguirá sin readmitir a los 18 militantes de Sestao expulsados hace casi un año, pese a la última sentencia judicial. La dirección socialista ha recurrido el fallo, que confirma la anulación de la suspensión de la militancia, y argumenta que "no está claro que haya que readmitirles". La sentencia, de diciembre pasado, apercibía de la imposición de multas por "cada mes que transcurra" sin cumplirse el fallo.
La crisis del PSE en Sestao sigue sin cerrarse totalmente desde que surgieron los problemas a principios de 2000. De hecho, la agrupación local ha estado dirigida más de un año por una gestora constituida en el verano de 2001, tras la destitución de toda la ejecutiva del PSE en Sestao, y ahora es un comité electoral el órgano de dirección de los socialistas del municipio.El episodio más grave de la crisis ocurrió en marzo de 2002, cuando 18 militantes -casi toda la ejecutiva local-, con el histórico dirigente José Luis Marcos Merino entre ellos, fueron expulsados. La acusación era haber pactado con el PNV y la entonces Euskal Herritarrok una moción de censura contra el alcalde, Segundo Calleja, enfrentado a ellos desde el principio de la legislatura. Meses antes habían sido expulsados otros dos concejales del sector de Marcos Merino, que habían abandonado el grupo municipal y pasaron al mixto.
Los afectados decidieron recurrir la expulsión a los tribunales ordinarios y en julio un juzgado de Barakaldo ordenó la reincorporación de los 18 militantes, para "asegurar la protección de un derecho fundamental" como es el de asociación. El PSE recurrió el auto, pero el juzgado de Barakaldo ratificó la sentencia en en diciembre, advirtiendo la imposición de multas en caso de incumplimiento. Miembros de la dirección, tanto del PSE como del PSOE, confirmaron que la providencia se ha vuelto a recurrir y coincidieron en la firme decisión de no reafiliar a los expulsados. "No está claro lo de la readmisión, porque se dice que se vuelva a la situación anterior y tenemos otra sentencia que nos da la razón". Junto a ello, argumentan un motivo formal: que los afectados han recurrido la expulsión ante la ejecutiva federal del PSOE y no la Comisión de Garantías, que fue la que adoptó la decisión final.
Los expulsados han pedido al juzgado la aplicación de la sentencia, con la multa prevista, y la apertura de diligencias penales por desobediencia contra la dirección del PSOE. "El partido se ha equivocado en Sestao y los van a pagar caro", señaló Marcos Merino, número dos del PSE entre 1989 y 1994, que junto a los otros expulsados prepara una plataforma de vecinos para presentarse a las próximas elecciones municipales.
Merino señaló que el PSE tiene problemas para elaborar la lista de candidatos al Ayuntamiento y que Calleja será el único alcalde socialista que no se presenta a la reelección en los comiciós del próximo 25 de mayo, en contradicción con la decisión de la dirección vasca de que repitan todos los primeros ediles del PSE. Fuentes de la dirección del PSE no quisieron confirmar la salida de Calleja y apuntaron que "es posible". El candidato que se perfila es la actual teniente de alcalde Alexia Castelo.
