La ministra francesa de Ecología asegura que el 'Prestige' pierde fuel

La ministra francesa de Ecología, Roselyne Bachelot, volvió ayer a París más preocupada de lo que estaba antes de su visita a Galicia, efectuada el martes pasado. "Hay motivos suplementarios de inquietud", informó a la Asamblea Nacional. "Teníamos la esperanza de que, una vez naufragado el 'Prestige', el combustible se congelaría en el fondo [del mar]. Esto no ha ocurrido y todavía hay fugas en la carga", dijo Bachelot a los parlamentarios. Su versión contradice la que sostiene el Gobierno español, que niega nuevos vertidos.

La ministra respondió a una pregunta planteada por el alcalde y diputado de Bayona, Jean Grenet, sin ocultar la preocupación por la posibilidad de que la marea negra afecte finalmente al litoral francés de Aquitania, que comprende Las Landas y el País Vasco-francés. "Se ha observado una mancha de hidrocarburo extremadamente importante al norte del cabo Ortegal, sobre la costa cantábrica", dijo Bachelot en referencia a la contaminación observada a 150 kilómetros al este del lugar donde se produjo el naufragio del Prestige. La ministra terminó su parlamento aseverando que "la cooperación entre Francia y España funciona bien".

Al día siguiente de comprometerse con España a alejar los navíos peligrosos de sus costas, el Gobierno francés dio la voz de alarma sobre el riesgo de que un nuevo petrolero-basura pase la semana próxima cerca de las costas de Bretaña y posteriormente enfile la ruta de Galicia. Se trata del Byzantio, que tiene previsto cargar hoy 50.000 toneladas de fuel en el puerto báltico de Muuga y pretende pasar cerca de Galicia, en ruta hacia Singapur. París obtuvo ayer de Estonia el compromiso de inspeccionar ese barco, amenazando a este país con que se juega la entrada en la Unión Europea si no hace lo que se le pide.

Por el Canal de la Mancha

El petrolero-basura tendría que pasar por el Canal de la Mancha y navegar cerca de la Bretaña francesa, en torno al 4 o el 5 de diciembre, antes de enfilar hacia España. La decisión de París se debe al cúmulo de circunstancias peligrosas que concurren en el petrolero, monocasco y muy viejo: tiene 26 años de antigüedad, va a transportar una carga de riesgo y enarbola pabellón de conveniencia de Malta, después de haber usado el de Honduras. Además ha sido fletado por Crown Resources, la misma compañía del Prestige, vinculada al grupo ruso Alfa.

A todas luces se trata del flete intentado por los mismos que han perdido el petrolero naufragado cerca de Galicia, y cuyas responsabilidades serían muy difíciles de exigir a causa de la opacidad de los montajes jurídicos bajo los que operan, como van a tener ocasión de comprobar los afectados por la marea negra de Galicia. Francia, muy escarmentada desde la catástrofe del Erika, ha decidido que esto no le vuelve a pasar.

Así las cosas, todo estaba preparado en el puerto estonio de Muuga para cargar fuel pesado a bordo del Byzantio, del mismo tipo que llevaba el Prestige. Ésta es la séptima vez que el petrolero en cuestión recala en sus aguas sin que se haya producido incidente alguno en las ocasiones anteriores. El Byzantio fue revisado hace una semana en Rotterdam (Holanda), ¿a qué viene tanta agitación?, preguntaban las autoridades de Estonia a París. El secretario de Estado de Transportes, Dominique Bussereau, fue el encargado de advertir de que la actitud de Estonia va a dar la medida de si este país tiene "verdaderamente la voluntad de entrar en Europa". Al final de la jornada, las autoridades de Estonia aseguraron que inspeccionarán el barco.