Los rebeldes chechenos derriban otro helicóptero ruso
Un helicóptero de combate ruso Mi-24 fue derribado ayer por un misil en Chechenia, resultando muertos los dos pilotos del mismo, según anunció la agencia rusa Itar-Tass. El incidente tuvo lugar cuando dos helicópteros Mi-24 escoltaban a uno de transporte Mi-8. El piloto de uno de los Mi-24 se dio cuenta de la desaparición del otro aparato de este tipo y dio media vuelta para ir en su busca, encontrándolo derribado. El equipo de rescate que acudió a continuación constató que el helicóptero fue derribado por un misil, según el Estado Mayor de las fuerzas rusas en el Cáucaso Norte. 'A dos kilómetros al oeste de Mesketi, vieron sus restos en el suelo', manifestaron ayer fuentes militares, al decir que inmediatamente se envió un equipo de rescate al lugar de la catástrofe, aunque sólo pudo recuperar los dos cadáveres.
Nikolái Deriabin, portavoz oficial del Ministerio de Defensa de Rusia, informó de que el capitán Nikolái Volodin y el teniente Alexandr Blojin, murieron en el siniestro, según la agencia Interfax. Deriabin declaró que el comandante en jefe de las tropas rusas en Chechenia, general Vladímir Moltenskói, ordenó un 'peinado total' de la zona, en presumible busca de los autores del lanzamiento del misil.
Éste es el segundo helicóptero ruso abatido por los guerrilleros chechenos en los últimos días. El pasado 19 de agosto un helicóptero militar de transporte Mi-26 fue derribado cerca de Grozni por un misil disparado por los rebeldes chechenos, según las conclusiones de la investigación oficial. De los 147 ocupantes del Mi-26, autorizado únicamente para llevar 83 personas como máximo, 118 fallecieron y otros 29 resultaron con heridas de diversa gravedad.
La destrucción del nuevo aparato fue reivindicada por los servicios de prensa del presidente independentista Aslán Masjadov, en una llamada telefónica a la agencia France Presse. El helicóptero cayó cerca de la localidad de Bechil-Irzu, a un centenar de kilómetros al sureste de Grozni, la capital chechena.
