VETERANÍA Y JUVENTUD
Los de Moré hacen frente a la retirada de Eusebio y la pérdida de sus goleadores
El Valladolid se ha apuntado con extremismo a la austeridad dominante. Sólo 0,3 millones de euros en fichajes han salido de sus vacías arcas para reforzar una plantilla que el año pasado se quedó a las puertas de Europa, pero que en el verano ha sufrido la salida de sus dos máximos goleadores de la pasada temporada, Tote y Fernando, y la retirada del querido Eusebio.
Pero, como nada se ha vendido, nada o casi nada se ha comprado y las fórmulas de las cesiones, las opciones de compra y las de recompra han sido los términos que han dominado el proceso de creación de este Valladolid, un club que sufre una importante crisis institucional desde que Ignacio Lewin abandonó la presidencia y los accionistas mayoritarios, empresas como Palcos Blancos o Inversiones Somosaguas, no quieren saber casi nada de su propiedad futbolística castellana.
Con todo, el equipo que ha formado el técnico, Pepe Moré, no tiene mala pinta. Más bien, viene a ser la repetición de los experimentos que en los últimos años le han consolidado en la Primera División. A saber: jugadores jóvenes, muy jóvenes, que llegan al Valladolid a debutar en Primera, la cesión como herramienta barata en tiempos de crisis y dos o tres veteranos que mantengan el vestuario a flote. Este año los cedidos, como siempre del Madrid, son Aganzo y Sousa, y un central argentino llamado Mustafa. A ellos se une el comprado Óscar Sánchez, procedente del Badajoz.
Por detrás de toda esa exhibición de juventud siguen en Valladolid un grupo de futbolistas más que clásicos: Ricardo, Torres Gómez, Peña, Marcos, Caminero y Fernando Sales.
El presidente blanquivioleta, Carlos Suárez, esperaba hacer caja con alguno de ellos y Sales estuvo a punto de marcharse con Fabio Capello al Roma, pero, al final, la espina dorsal del equipo y del vestuario será la misma que en las últimas temporadas. El sistema de Moré volverá a ser el mismo y el objetivo, una vez más, la permanencia por un lado y poner la cuenta de resultados al día de una vez por todas.
LAS CARAS
CAMINERO: EL LÍDER Cuando hace diez meses comenzó a jugar en el centro de la zaga, Caminero se vio tan bien que no dudó en afirmar que estaba para ir a la Copa del Mundo. Esta campaña lo tiene más claro. Ya no está para recortes en la banda. Así que, por delante de Ricardo, reencontrará su segunda juventud.
RICARDO: LA SEGURIDAD A la vuelta de la cita asiática, Ricardo se ha encontrado con que Iñaki Sáez considera que por delante de él solo está Casillas. Lo que no parecía tan real era que el ex atlético fuese a seguir en el Valladolid, pero la crisis de fichajes del verano le ha dejado en una ciudad donde, sobre todo, es muy feliz.
PEPE MORÉ: EL ALQUIMISTA Ningún verano es de descanso para Moré. Siempre se le busca un sustituto, nunca es la primera opción. Pero, al final, el técnico ya lleva dos años con el equipo a la espalda y extrayendo un rendimiento extraordinario de futbolistas en proceso de adaptación, de cedidos que llegan a veces por la puerta de atrás.
