_
_
_
_
_

El chavismo intenta recuperar el control del tribunal

Juan Jesús Aznárez

El oficialismo confía en revertir la correlación de fuerzas en el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) cuando se reincorporen dos magistrados recusados por la defensa de los militares acusados. El TSJ tiene 20 miembros y fue constituido por la Asamblea Nacional, por pacto entre el Gobierno y su partido, el Movimiento V República (MVR), fundado por Chávez, y partidos de la oposición.

Delegados del Gobierno, asistido por Luis Miquilena, que meses atrás chocó con Chávez y se pasó a la oposición, designaron a la mayoría de los magistrados. La deserción de Miquilena cambió la correlación de fuerzas en el TSJ. Ahora es ligeramente favorable a las tesis de la oposición. La sentencia del miércoles obedece a una 'mayoría circunstancial', dijo ayer el fiscal general, Isaías Rodríguez. 'Una vez que se reincorporen los dos magistrados recusados (y sustituidos por jueces suplentes), la correlación de fuerzas podría cambiar'.

Más información
El Supremo de Venezuela ahonda la división del Ejército al exculpar a los jefes golpistas

La independencia del poder judicial parece una quimera en Venezuela. Gobierno y oposición aplauden sus decisiones cuando los secundan. Ahora, las cañas se tornaron lanzas para el oficialismo, que ha recibido el golpe más severodesde que Chávez asumió el poder. La preocupación del Gobierno no es gratuita y su origen es 'la evidencia pública y notoria de que el TSJ es capaz de tomar decisiones trascendentales en contra del interés político de la onda revolucionaria', señala el analista Carlos Subero. 'Esta derrota política de Chávez no le liquida, pero le muestra más débil aún y en precariedad para poder avanzar en su anhelado proyecto'.

Chávez no ignora esto y apuntó la próxima reforma del TSJ señalando 'errores que se expresan ahora y perturban el funcionamiento del sistema'. 'Habrá que activar los mecanismos de la Constitución para corregir aquellos errores'. La Carta Magna permite convocar una nueva Asamblea Constituyente. La Asamblea Nacional, controlada por el partido oficial, estudia esa posibilidad. Otros piden un referendo para incorporar las reformas sin trámite parlamentario. El presidente de la Asamblea Nacional, William Lara, recupera la memoria, dormida mientras el TSJ exhibía docilidad al Ejecutivo. El dirigente del partido chavista apoyará la destitución de los magistrados que supuestamente presentaron documentos falsos en el momento de su nombramiento.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_