Servicios Sociales y el Defensor del Menor discrepan por un caso de malos tratos

En el centro de menores de Hortaleza duermen desde el pasado 29 de junio tres hermanos (dos niños de cinco y tres años, y una niña de dos). Son hijos de V. H. M. F., ecuatoriano de 24 años. La Comunidad tuteló a los chicos tres días después de la denuncia por malos tratos interpuesta por Eugenio Pesquero, director de la guardería a la que acudía la niña. Este caso, en el que ha intervenido el defensor del Menor, Pedro Núñez Morgades, llevó ayer a la consejera de Servicios Sociales, Pilar Martínez, del PP, a arremeter contra éste al creer que opinó antes de tener toda la información del asunto.

Ante la comisión extraordinaria de Servicios Sociales, convocada en la Asamblea a petición del PSOE, Martínez concluyó que la niña no sufrió maltrato, sino que 'el padre le pegó un azote en el culo cuando vio que había dejado abierta la espita del gas'. La consejera espetó a Núñez Morgades: 'El defensor debería investigar y tener la información antes de opinar'. Núñez Morgades abrió en junio una investigación para aclarar si la consejería cometió 'negligencia' al tardar tres días en encargarse de los niños.

El defensor del Menor espera recibir el informe técnico de Servicios Sociales. 'Siempre dije que, si se comprobaba que había habido malos tratos, la actuación de Servicios Sociales era incorrecta', afirmó ayer. 'En casos de sospecha de malos tratos, más vale pasarse que quedarse corto, y la ley permite a la Comunidad actuar', agregó.

Examen médico

Carmen García Rojas, diputada del PSOE, explicó que cuando Pesquero descubrió unos hematomas en la niña, desde la cintura hasta la rodilla, llamó a Servicios Sociales; que éstos llevaron a la niña al centro médico de la calle de Pantoja (Chamberí), y que una doctora dictaminó que tenía síntomas de maltrato moderado ('hematomas de distribución lineal' entre la rodilla y la cadera). García Rojas aseguró que los servicios sociales no habían recogido a los niños el 27 de junio, día siguiente a la denuncia, porque no tenían vehículo. Pidió la remodelación del Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF) y la dimisión de su directora gerente, Esperanza García.

La consejera Martínez replicó que dos policías acompañaron a los trabajadores de servicios sociales a buscar a los niños a su casa el día 28, y que el 27 habían intentado notificar a los padres la tutela de sus hijos por la Comunidad. Los pequeños se encontraban con una pareja que se negó a entregarlos, al no estar sus padres, que en esos momentos declaraban en comisaría. El matrimonio quedó en libertad. La casa estaba ordenada y los niños limpios y bien vestidos. A última hora de la mañana del día 28, el padre contactó con la comisión de tutela y ésta le convenció de que lo mejor era que entregara a los tres niños. Lo hizo al día siguiente. Los padres están recibiendo sesiones terapéuticas para recobrar la custodia de sus hijos.