Ritmo frenético
El desarrollo de los acontecimientos en Argentina ha hecho saltar todas las alarmas en el mercado de valores español que, por segundo día consecutivo, registró el volumen más alto del ejercicio y el segundo de su historia con 3.639,68 millones de euros, 605.592 millones de pesetas.
La caída de la cotización de los grandes valores está arrastrando al conjunto de la bolsa y está activando las órdenes automáticas que los grandes inversores utilizan para sus actividades en el mercado de futuros. Ayer, estas órdenes sumaron el 44% del total del mercado, más de 260.000 millones de pesetas, y auguran tensiones de cara al último vencimiento del mercado de opciones y futuros de este ejercicio, que tiene lugar hoy viernes.
Si hace un par de semanas se acariciaba la idea de cerrar el ejercicio con beneficios o, al menos, sin pérdidas, ayer los inversores tiraron la toalla, convencidos de que en las tres sesiones hábiles que quedan -la semana próxima sólo abrirá el mercado dos días- no habrá posibilidades de rectificar la dirección que han tomado los precios de la mano de la crisis en Argentina.
La relativa calma con que se tomaron los acontecimientos en Estados Unidos, en donde sólo el mercado Nasdaq tenía problemas, no sirvió de ayuda a los inversores españoles, aunque la cotización de los tres grandes valores, BSCH, BBVA y Telefónica, consiguió mejorar sensiblemente al final de la sesión.
El Ibex 35 cedió el 1,13%, mientras que París bajaba el 0,92%, Londres el 0,79% y Francfort el 0,65% poco antes del cierre. Las últimas previsiones sobre el crecimiento económico afectan a todos los mercados, pero las empresas españolas tienen ahora una prima de riesgo muy elevada.
