Esperanza e irritación
Concluye el Festival de Sevilla, Cine y Deporte con una mezcla de esperanza e irritación. Esperanza porque un certamen sobre las películas centradas en el deporte tiene un campo atractivo de desarrollo y la experiencia de una primera edición puede reducir los errores. Irritación por la escasez de espectadores, por la selección de películas demasiado viejas para concursar en la sección oficial (tres de las 11 eran de 1998) y por los bailes de cifras del presupuesto. Sin embargo, la expectativa ha sido creada. Tras su primera edición, el Festival de Sevilla, Cine y Deporte deberá demostrar en citas sucesivas que ha superado estas deficiencias.
La consejera de Cultura, Carmen Calvo, resumió ayer esta impresión al resaltar que el festival está en una fase de arranque. 'No hay festivales dedicados al deporte. Es una buena idea. Hay que darle un tiempo a este festival. Creo que puede enganchar al público porque el cine deportivo ha producido grandes películas. Quizás no sean justos quienes se precipitan en juzgarlo con demasiada severidad', comentó Calvo.
La organización no ha dado cifras sobre asistencia de público. Con todo, el director del certamen, José Luis Ruiz, reconoció ayer a Efe que el público 'no ha respondido' como se esperaba. Ruiz abogó por mejorar los cauces de comunicación con el público, que 'se tiene que adaptar, tiene que poner de su parte y saber lo que va a ver, concienciarse de que sin su presencia el festival cojea'.
El baile del presupuesto ha causado desconcierto. El acto de presentación del festival, en junio de 2000, congregó a todas las instituciones andaluzas. Carmen Calvo; el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín; y el presidente de la Fundación Andalucía Olímpica, Alejandro Rojas-Marcos, intervinieron en la presentación del festival. La Fundación Andalucía Olímpica es la impulsora del certamen. En aquel acto se informó de que el festival tendría un presupuesto de 175 millones. En una nueva presentación, en mayo de 2001, se elevó el presupuesto a 300 millones. José Luis Ruiz dijo ayer que había costado 212 millones. Como punto de referencia, basta compararlo con el presupuesto del Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, que se eleva a 145 millones.
