Los Mossos son desde hoy la policía ordinaria del Bages y del Vallès Oriental
Los Mossos d'Esquadra son desde hoy la policía ordinaria -la encargada del orden público y la seguridad ciudadana en sustitución de la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía- de la denominada región policial central; es decir, la que abarca las comarcas del Bages, Osona, Berguedà, Solsonès y la Anoia, aunque, por razones estratégicas, en esta última comarca los agentes todavía no ejercen como policía ordinaria. Esta región central asume provisionalmente la comarca del Vallès Oriental, donde también hoy los Mossos se convierten en policía ordinaria.
Ayer, el conseller en cap de la Generalitat, Artur Mas, acompañado del consejero de Interior, Xavier Pomés, y de la delegada del Gobierno, Julia García Valdecasas, inauguró la nueva comisaría de Manresa, de la que dependerán 1.060 agentes en distintas subsedes. De estos, 110 serán destinados a controlar el tráfico interurbano.
Más que un relevo policial
El despliegue de los Mossos es para Artur Mas algo más que un relevo policial. El conseller en cap afirmó ayer que se trata de 'una muestra de consolidación del autogobierno' y es también la implantación de una división territorial propia, que en este caso coincide con el Plan Territorial General de Cataluña, con la excepción de la zona del Pirineo. El hecho de que Manresa sea sede central de los Mossos d'Esquadra de la Cataluña central es un primer reconocimiento oficial de esta región y del papel de Manresa. De hecho, Xavier Pomés mantiene que el ejemplo de implantación de la policía autonómica puede ayudar al debate de la división territorial. Mas, que precisó que el despliegue de los Mossos responde a la aplicación del Estatut d'Autonomia, agradeció la colaboración de las instituciones y del resto de cuerpos y fuerzas de seguridad. Para Mas, la asunción de funciones en nuevas comarcas constituye una prueba de la madurez del sistema democrático.
Además de la Cataluña central, la comisaría de Manresa tendrá asignado durante un año el Vallès Oriental, con sede de momento comarcal en Granollers, que en el futuro será una de las tres comisarías regionales en las que se subdividirá la zona de Barcelona, donde viven cuatro millones de personas. Así, los Mossos, que ya controlan las provincias de Girona y Lleida, inician el proceso para cerrar completamente su expansión en el norte de Cataluña. Después de Granollers vendrá el Maresme y, desde allí, la introducción en el área metropolitana de Barcelona.
Además de la comisaría de Manresa, en el Bages también se crean las oficinas de Monistrol de Montserrat, Cardona, Moià i Navàs. Y en el caso de Granollers, se crean dos comisarías de distrito en Sant Celoni y Caldes de Montbui y oficinas en Cardedeu, Montornès del Vallès i La Garriga.
