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La imposición de 75.000 multas agiliza las zonas de carga y descarga del Eixample

El número de turismos estacionados en los chaflanes pasa de 4,7 a 1,1 en cinco meses

Clara Blanchar

El plan de actuación del Ayuntamiento de Barcelona en las zonas de carga y descarga del Eixample ha conseguido duplicar las plazas libres de forma tajante: en cinco meses se han impuesto 74.998 multas. Además, la grúa se ha llevado 5.705 vehículos. Antes de iniciar el plan, en marzo, había una media de 0,6 plazas libres en los chaflanes. Actualmente hay 1,2. Según la Guardia Urbana, el plan ha logrado reducir la indisciplina de los conductores de turismos y se ha generalizado el uso del disco horario que marca el tiempo de estacionamiento a los vehículos comerciales.

El objetivo del plan de actuación en las zonas de carga y descarga, enmarcado en el Pacto para la Movilidad, es 'conseguir una distribución de mercancías ágil y ordenada'. Para ello, desde el pasado 5 de marzo se ha impedido el estacionamiento indebido tanto en estas áreas como en los carriles de circulación adyacentes y se ha implantado el disco horario obligatorio. Con este disco, repartido a los transportistas a través de sus gremios, los conductores de vehículos comerciales marcan la media hora de que disponen para realizar las tareas de carga y descarga.

La primera fase del plan de actuación se ha realizado, entre marzo y julio, en el área comprendida entre la avenida Diagonal y la calle de Urgell, la Ronda Sant Antoni y las calles de Pelai, Trafalgar y Nàpols. En total, 1.650 plazas distribuidas en 330 zonas.

La sociedad municipal que gestiona los aparcamientos, SMASSA, ha vigilado las zonas de carga y descarga. Las denuncias por estacionamiento indebido en estas plazas han sido 42.784. La Guardia Urbana ha controlado las zonas adyacentes, como el carril bus, y los aparcamientos en doble fila, y ha tramitado 32.214 multas por infracciones que dificultaban la fluidez del tráfico.

Menos turismos

El portavoz de la Guardia Urbana de Barcelona, Lluís Jiménez, explicó ayer los resultados de esta primera fase del plan. Además de la duplicación de plazas libres en los chaflanes, la experiencia ha permitido reducir de 4,7 a 1,1 la media de vehículos en los espacios destinados a carga y descarga. Respecto a la presencia de transportistas, se mantiene prácticamente igual, aunque se ha logrado reducir el tiempo de las operaciones de carga y descarga de mercancías.

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El portavoz de la Guardia Urbana valoró la campaña, así como la actitud de los conductores de vehículos comerciales, entre los que se ha generalizado el uso de los discos horarios. Actualmente, el 96% de las operaciones de carga y descarga se realizan en menos de 30 minutos.

Otra de las consecuencias de la primera fase del plan es la mejora registrada en la velocidad media de las calles de Aribau, Muntaner y Balmes. entre otras. En estas tres vías la velocidad de circulación registrada durante el segundo trimestre de 2001 ha aumentado más de dos kilómetros por hora respecto al mismo periodo del año pasado.

El Ayuntamiento y la Guardia Urbana consideran suficientes las 6.194 plazas de carga y descarga existentes, siempre que se garantice su uso solamente para operaciones comerciales que no sobrepasen los 30 minutos de estacionamiento permitido. Lluís Jiménez anunció que el Ayuntamiento extenderá el plan de actuación a todo el distrito del Eixample a partir de septiembre.

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Sobre la firma

Clara Blanchar
Centrada en la información sobre Barcelona, la política municipal, la ciudad y sus conflictos son su materia prima. Especializada en temas de urbanismo, movilidad, movimientos sociales y vivienda, ha trabajado en las secciones de economía, política y deportes. Es licenciada por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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