UNA DIOSA VIVIENTE DE CUATRO AÑOS
Una nueva diosa viviente de cuatro años de edad, conocida como Kumari, reverenciada por millares de hindúes y budistas, se ha instalado en Nepal desde el martes pasado, según anunció uno de sus sacerdotes. La selección de Reshmila Shakya fue un secreto muy bien guardado. La elegida sustituye a la anterior, de 12 años de edad, elegida en 1995, que ha tenido que retirarse, según exige la tradición, al llegar a la pubertad. Su papel se limita a aparecer varias veces al día, con un vestido color oro y un tercer ojo pintado en la frente, en una ventana del templo donde vive y desde donde bendice a los fieles. En algunas festividades desfila en un palanquín o en una carroza por las calles de Katmandú. La mayoría de las diosas retiradas se quedan solteras porque la mayoría de los hombres no se atreven a casarse con una antigua diosa. Sin embargo, el Gobierno les da una pensión de 3.000 rupias (7.800 pesetas) al mes. Las diosas reinantes tienen un sueldo mensual de 6.000 rupias.