David Duchovny muestra su perfil cómico en 'Evolution'

Con dos adjetivos describe David Duchovny, el agente Fox Mulder de Expediente X, a su última compañera de cartelera, Julianne Moore: 'Magnífica actriz, muy profesional'. 'Viene, como yo, de la televisión, así que sabemos trabajar duro. Eso me gusta de ella', comenta sobre la popular actriz, candidata al Oscar por Boogie nights, con quien protagoniza Evolution, la comedia del verano de Ivan Reitman, que se estrenó ayer en España. 'Trabajamos mucho más que los actores de cine, de 12 a 14 horas diarias y sin tiempo muerto que perder en el camerino', puntualiza.

Nacido en Nueva York hace 41 años, Duchovny no necesita presentación. La televisión puso en órbita su rostro vía el doble papel de travesti en Twink Peaks, la serie de David Lynch, y, por supuesto, como el escéptico agente federal de Expediente X. Pero, el mes pasado, rodó el último capítulo bajo el traje de Mulder para iniciar una etapa centrada en los retos creativos de la gran pantalla. 'Ocho años en la serie, más de la mitad de mi vida profesional, me han asegurado el reconocimiento mundial. La echaré en falta', dice.

En Evolution descubrió una válvula de escape. Se enfrenta a bichos extraterrestres y no es ajeno al mundillo gubernamental, pero acción y comedia adquieren prioridad. 'La comedia es un desafío. Sólo admite el blanco y negro, es decir, si no divierte mejor estarías muerto. A mí no me resulta fácil porque soy reservado, tranquilo y mi humor tiende a ser inexpresivo', afirmó en Londres la semana pasada.