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Entrevista:RODOLFO ECHEVERRÍA | SECRETARIO DEL PRI

'El PRI es la izquierda posible'

Juan Jesús Aznárez

La elección de Rodolfo Echeverría como secretario general del Partido Revolucionario Institucional (PRI) constituye el primer paso hacia la reconstrucción de un movimiento que fue régimen y perdió el norte y la presidencia de México el 2 de julio del año pasado, después de haberla retenido durante 71 años. 'Recibimos un sonoro castigo electoral, que nos merecíamos'. Echeverría, de 54 años, ex embajador en España de 1994 a 1998, sobrino del ex presidente Luis Echeverría (1970-1976), ocupó numerosos cargos en el PRI, primera minoría hoy en el Congreso, una formación que es todavía la de mayor implantación nacional. Su concurso, destaca, es 'indispensable para la gobernación de México'. No desconoce, sin embargo, que, sin una profunda introspección, su supervivencia peligra: 'La sociedad nos vigila con una gran lupa. Estamos en el acto de contrición y el propósito de la enmienda'. Rodolfo Echeverría obtuvo, en voto secreto, el 65% del apoyo del Consejo Político Nacional.

'La sociedad nos vigila con una gran lupa. Estamos en el acto de contrición y el propósito de enmienda'

Pregunta. ¿Qué méritos ha visto en usted el CPN para designarle secretario general de un partido sumido en las divisiones?

Respuesta. Mi antigua militancia en el PRI me ha permitido erigirme en una pieza de entendimiento entre las diferentes fuerzas del partido. No es fácil armonizarlas. Tengo una interlocución muy clara con ex dirigentes del partido, con sus personalidades más descollantes y con los líderes sindicales. Creo que eso hace que mi trabajo sea muy útil en estos momentos de transición.

P. Sin embargo, el PRI no parece tener una propuesta clara que ofrecer a la sociedad mexicana.

R. El PRI está encaminado hacia la Asamblea Nacional que se celebrará el próximo noviembre. Será la más importante que haya celebrado desde sus años fundacionales. No exagero. El PRI tendrá que realizar una profundísima reforma de sí mismo si es que quiere persistir y continuar siendo la fuerza electoral más ramificada e implantada en todo el territorio. Y lograr que su eje transformador radique en dos objetivos: la incorporación de millones de jóvenes mexicanos que dentro de tres años serán votantes y una lucha real, no declamatoria, al lado de las mujeres en un país con una profunda desigualdad social.

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P. ¿Cómo va a soltar ese lastre que le ha creado al PRI la imagen de partido corrupto?

R. No creo que haya partido en el mundo que, estando en el poder tantos años y a veces durante menos años, se haya librado de la infiltración de indeseables. Cuando un partido está en la oposición, quien ingresa en ese partido lo hace las más de las veces por convicción; pero, cuando un partido está en el poder, algunos ingresan por interés, para negociar comisiones, para corromperse. Eso les ha pasado a muchos partidos en el poder, entre ellos al mío.

P. Las consecuencias electorales fueron muy claras el 2 de julio.

R. Hemos recibido un sonoro castigo electoral -un revolcón, como dirían los taurinos- que nos merecíamos. Y aprendimos la lección. Tendremos que hacer, como decía mi maestra de primaria, un acto de contrición y un propósito de enmienda. En eso estamos.

P. ¿Cómo se definiría usted: de centro, de izquierda, de derechas? El PRI ha ocupado todos los espacios a lo largo de su historia.

R. El PRI agrupó a toda suerte de personalidades, grupos y sectores que pertenecieron a lo que hoy se llama el centro-izquierda. Yo me sitúo dentro de los segmentos más democráticos y modernizadores. Si hablamos de etiquetas, diré un centro-izquierda progresista. El PRI es la izquierda posible en México A la izquierda del PRI no hay más que posiciones erráticas y desbrujuladas.

P. ¿No teme usted el embate de los llamados dinosaurios del PRI, de aquellos militantes apegados a las viejas prácticas y corruptelas?

R. Tienen fuerza, pero tienen más los sectores nuevos. Los jóvenes son mayoría.

P. ¿Está resultando difícil la recuperación del PRI después de haber perdido la presidencia de la república, la argamasa?

R. Sí, ello es innegable. Durante decenios, el presidente de la república fue el eje articulador del partido. Hoy es su Consejo Político. Ahí debatimos y acordamos lo que se tiene que hacer.

P. ¿Qué oposición piensan hacerle al presidente Vicente Fox?

R. Será una oposición responsable y no destructora de aquello que provenga del Gobierno.

Rodolfo Echeverría, en marzo de 1999.
Rodolfo Echeverría, en marzo de 1999.ASSOCIATED PRESS

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