_
_
_
_
_

ACESA ha ingresado 16.000 millones más de los previstos desde que se rebajaron los peajes

ACESA, principal concesionaria de autopistas en Cataluña, ingresará este año unos 66.000 millones de pesetas, 10.000 millones más de los previstos por la propia compañía tras la rebaja de peajes de 1998, según Xarxa Viària. Una cantidad que hay que sumar a los casi 6.000 millones más que ingresó el año pasado, cuando se esperaba una reducción de la misma cuantía. Esto hace que los ingresos acumulados entre 1999 y 2000, sólo en la división de peajes, sumen 126.000 millones frente a los 110.000 millones calculados para negociar la prolongación de las concesiones.

La primera reunión de la comisión para el estudio de los peajes en Cataluña decidida en junio por el Parlament se produjo ayer. Y los miembros de la Declaración de Gelida, plataforma que agrupa más de un centenar de entidades que reclaman la regulación de los peajes, aprovechó para hacer públicos los datos de ACESA, a partir de las cifras facilitadas por la propia compañía en sus memorias. La conclusión, explicó el gerente del consorcio Xarxa Viària, Jordi Carrillo, es que el anuncio de que ACESA dejaría de ingresar miles de millones y que no recuperaría el nivel de 1998 hasta 2003 se ha manifestado inexacto. En los dos primeros años de rebajas la empresa ha recaudado 16.000 millones más de los previstos y ha superado los ingresos previstos por la propia compañía para 2006."Alguien se equivocó", aseguró Carrillo, "y cuando uno se equivoca conviene rectificar. Entendemos que hay dos posibilidades: o anular la prolongación de cinco años en las concesiones, que se hizo previendo una reducción de ingresos que no se ha producido, o emplear estos ingresos de más en reequilibrar los peajes bajándolos más y anulando alguno cuya lógica no está clara".

ACESA hizo públicas, en 1998, cuando se le prolongó la concesión, las cifras que, en su opinión, justificaban esta medida. Los ingresos previstos para 1998 eran de 59.291 millones, que tenían que descender a 54.310 millones en 1999. La realidad fue que en ese año la cifra recaudada por peajes fue de 59.953 millones. Para este año 2000, la previsión de ingresos era de 56.036 millones. El tercer trimestre se ha cerrado con unos ingresos de 50.958 millones de pesetas y la proyección de ingresos para todo el año arroja la cifra de 66.000 millones. Total previsto por la empresa para los dos años: 110.000 millones de pesetas. Cantidad por ingresar realmente: 126.000 millones de pesetas.

Medidas propuestas

Con estos datos en la mano, la Declaración de Gelida entregó ayer al resto de miembros de la comisión acordada por el Parlament una propuesta de trabajo en la que se propone avanzar en las siguientes medidas: mantener congelado el aumento de tarifas, como ya anunció en marzo el Gobierno central, y a cuya idea se sumó a los pocos días el Gobierno catalán, tras haber autorizado el incremento días antes; establecer la revisión de las tarifas en función del volumen del tránsito, en lugar de mantenerlas vinculadas al índice de precios al consumo; suprimir los peajes metropolitanos, con urgencia especial para el caso del de La Llagosta, siguiendo la pauta acordada por el Parlament; revisar el precio del peaje de Les Fonts de Terrassa (Vallès Occidental), ya que entienden que se paga por un recorrido más largo del que en realidad se realiza; reducir el precio de los túneles de Garraf a los kilómetros reales de pago, manteniendo el precio actual por kilómetro; revisar la situación de los peajes en torno a Girona, Tarragona y Lledia, y promover su gratuidad, sin discriminar a los vehículos que no entran o salen en la zona, y exigir el cumplimiento del acuerdo parlamentario en el que se instaba al Gobierno central a crear un fondo de rescate de los peajes a partir de los impuestos que gravan el uso de las autopistas.

Carrillo explicó que, "sigue habiendo una discriminación de Cataluña" respecto al resto de España en materia de peajes. Además adujo: "Es un asunto no resuelto" porque en España casi el 80% de las autopistas son gratuitas y el 20% restante son de pago, porcentaje que se invierte en el caso de Cataluña.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

"Si hay un reconocimiento de este agravio comparativo" por parte del Ministerio de Fomento y de la Generalitat y si las empresas concesionarias admiten que hay un "desequilibrio territorial", es necesario plantear un nuevo modelo de autopistas que "elimine esta situación anómala en la que unos pagan y otros no". En este sentido, señaló la necesidad de establecer un calendario de unos cinco años que tenga como prioridades las zonas colindantes a las grandes áreas urbanas de Cataluña, que deberían ser analizadas "caso por caso".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_