La ONU enviará a Timor Oriental una misión de 'cascos azules'
El Consejo de Seguridad de la ONU decidió ayer enviar una misión de cascos azules a Timor Oriental y consideró que deben responder con firmeza a las amenazas de las milicias en la región. La resolución, adoptada por unanimidad de los 15 miembros del Consejo, fue tomada tras el asesinato el miércoles de tres representantes de la Alta Comisaría de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Timor Occidental. El máximo órgano de decisión de la ONU insistió en que el Gobierno de Indonesia tome medidas adicionales inmediatas, en cumplimiento de sus responsabilidades en Timor Oriental, "para desarmar y desmantelar las milicias inmediatamente y restaurar la ley y el orden".
El Consejo de Seguridad exigió al Gobierno de Yakarta que "garantice la seguridad de los campamentos de refugiados y de los trabajadores humanitarios y que impida las incursiones en Timor Oriental". La ONU condenó el asesinato de los tres representantes y demandó a las autoridades indonesias que tomen medidas efectivas para asegurar el retorno seguro de los refugiados en Timor Occidental que deseen regresar a Timor Oriental.
El Consejo de Seguridad dijo que los trabajadores de ACNUR, evacuados tras los incidentes del miércoles, no pueden volver hasta que se garantice su seguridad de forma "creíble". La situación se ha deteriorado en los últimos meses debido a los ataques de las milicias partidarias de la unión con Indonesia de la parte Oriental de Timor, que votó por su independencia en agosto de 1999. Unos 80.000 refugiados continúan en Timor Occidental, entre los que se esconden los milicianos partidarios de la integración con Indonesia.
