El PP y Convergència rivalizan para ayudar al monasterio de Montserrat
Convergència i Unió y el Partido Popular se encuentran en plena batalla de Montserrat. Ambas formaciones rivalizan para atraerse la simpatía del Patronato de la Montaña de Montserrat y del monasterio, con toda la carga simbólica que ello comporta en el imaginario del catalanismo. Ambos partidos han entrado iniciativas casi idénticas en el Congreso para que las donaciones para reconstruir Montserrat tras las inundaciones sean deducibles y el PP ha llevado la misma propuesta al Parlament.
En la fase de negociación de los Presupuestos de la Generalitat para este año, el PP trató de penetrar en entidades tradicionalmente asociadas al mundo de CiU por la vía de las enmiendas. El caso de Montserrat fue uno de los más emblemáticos: el PP impuso una enmienda para destinar 200 millones de pesetas a la abadía después de que CiU no se hiciera eco de la petición como consecuencia de las restricciones exigidas por el propio PP.CiU ha visto esta semana la posibilidad de resarcirse presentando en el Congreso una proposición de ley que pide que sean deducibles todas las donaciones para reconstruir Montserrat, asolada por el temporal del día pasado 10. La iniciativa propone que las obras de reconstrucción puedan ser consideradas "actividades y programas prioritarios de mecenazgo". Ello implica que los donativos gozarían de una deducción del 25% en el impuesto sobre el rendimiento de las personas físicas (IRPF) y de un máximo del 15% en el de sociedades.
Sin embargo, el PP ha reaccionado con rapidez y por partida doble: ayer presentó sendas proposiciones no de ley tanto en el Congreso como en el Parlament. Los textos, que sólo se diferencian entre sí por el idioma empleado, consideran prioritario establecer "ayudas concretas para el monasterio de Montserrat y su entorno" como consecuencia de su "importancia histórica, cultural y religiosa para la sociedad española". En ambos casos se reclaman deducciones del 25% del IRPF: en el Congreso para el tramo general y en el Parlament para el 30% autonómico.
En el Congreso, donde los conservadores disponen de mayoría absoluta, el PP ha decidido presentar una proposición no de ley -CiU ha optado por una proposición de ley- porque los presupuestos sólo pueden modificarse por ley orgánica.
