Aceites del Sur invierte 1.000 millones para entrar en el mercado de Oriente Medio
La familia Guillén, propietaria de la industria sevillana Aceites del Sur, ha decidido poner en práctica un ambicioso plan de inversiones (valorado en unos 1.000 millones de pesetas), para introducirse en el mercado de Oriente Medio y los países árabes. El director general de la empresa, Gonzalo Guillén, indicó ayer que el proyecto tendrá su base en Siria y aprovechará la producción olivarera de este país. La compañía sevillana (la segunda envasadora mundial de aceite de oliva, tras la multinacional Koipe), tiene previsto iniciar la producción en Siria a finales de año, una vez finalizada la construcción de un molino. El objetivo es aprovechar el arranque de la cosecha de esta campaña.En enero del año 2001, está previsto que comiencen las obras de una planta de refinamiento y otra de envasado. El proyecto de Aceites del Sur prevé completar todo el ciclo productivo en Siria; según las previsiones de Guillén, del proceso de extracción de aceite resultarán 120 toneladas diarias (que se triplicarán en dos años) y la planta de envasado tendrá una capacidad máxima de 100.000 litros diarios.
De esta manera, Aceites del Sur refuerza la vertiente exterior de su negocio: en 1999, las exportaciones a 65 países ya significaron el 45% de su facturación (21.000 millones de pesetas). Y ya ha abierto centros de distribución en Nueva York, Moscú, Sao Paolo y Buenos Aires. La firma con sede social en Dos Hermanas (Sevilla), que recibirá el próximo 7 de junio el premio Empresa del Año que otorga el club Antares, completará sus planes de inversión con la construcción de una fábrica en La Roda de Andalucía (Sevilla), similar a la que ya tienen en Humilladero (Málaga). La propietaria de la marca La Española se gastará unos 700 millones en esta actuación.
Promoción por Internet
La comercialización y las campañas de promoción del aceite en el exterior son algunos de los retos que se ha marcado el sector. Así, todas las denominaciones de origen de aceite de oliva en Andalucía van a participar de una campaña nacional que persigue la difusión en el mundo, a través de Internet y de las grandes cadenas de televisión vía satélite, de las excelencias del aceite de oliva de calidad. Igual que los vinos con denominación de origen consiguieron romper la barrera que los separaba de la gran masa de consumidores, ahora se quiere hacer lo mismo con el aceite de oliva virgen extra, cuyo precio elevado retrae a muchos consumidores.
"El futuro de este aceite está muy ligado a la defensa de la calidad", manifestó Rafael de la Cruz, presidente del consejo de la denominación de origen de Sierra Mágina y delegado de Agricultura en Jaén, una de las tres existentes de momento en la provincia jiennense. La campaña, que se presentó ayer en la Diputación de Jaén, tiene un coste global de 122 millones de pesetas y en ella se integran las denominaciones de origen andaluzas de Mágina, Segura, Cazorla, Baena, Priego de Córdoba, Sierra de Cádiz, Montes de Málaga y Sierra de Gata, además de otras tantas de otras comunidades.
Se elaborarán vídeos que se proyectarán, en los dos próximos años, en canales temáticos de las plataformas digitales, en grandes cadenas de televisión de Estados Unidos, Iberoamérica o Japón, así como en compañías aéreas, Renfe, Paradores Nacionales y grandes grupos hoteleros. Además, se creará una web en Internet con toda la información y con la finalidad de "poder entrar en los grandes circuitos de comercialización de todo el mundo", manifestó Felipe López, presidente de la Diputación de Jaén.
En la financiación de la campaña se implicarán las distintas diputaciones andaluzas, las consejerías de Agricultura y Turismo y las entidades financieras La General, Unicaja y Caja Rural. Aproximadamente un tercio del total de los aceites producidos en una campaña puede recibir la calificación de denominación de origen, que es el resultado de una meticulosa elaboración que permite obtener un producto natural con las máximas garantías, según indicó De la Cruz.
