El PNV estudiará si hubo fraude en la elección de su presidente en Álava
La ejecutiva nacional del PNV, presidida por Xabier Arzalluz, analizará hoy la reelección al frente del partido en Álava de José María Gerenabarrena, entre acusaciones de irregularidades. En la asamblea provincial del sábado, tres delegados que tenían que apoyar al renovador Manuel Allende incumplieron el mandato de los afiliados y votaron a Gerenabarrena. Varios delegados han anunciado que impugnarán los resultados. En la reunión de hoy participará por vez primera un representante del PNV en el País Vasco francés.
Las presuntas irregularidades fueron constatadas el mismo sábado, tras la polémica votación. En la asamblea provincial participan 63 compromisarios. Cuatro habían anunciado que no iban a acudir a la reunión, y tres más se abstuvieron porque en las respectivas juntas municipales era igual el número de seguidores de Gerenabarrena que de Allende, concejal peneuvista en Álava. Es decir, había 56 votos en juego. Allende y su equipo llegaron a la asamblea decisiva con la garantía de tener 28 apoyos, vistos los resultados previos en las asambleas locales. Sin embargo, Gerenabarrena, presidente de la ejecutiva alavesa desde 1992 con un paréntesis de dos años, ganó en el recuento del escrutinio secreto por 31 votos a 25.Muy molestos, los seguidores de Allende pidieron en la misma asamblea a todos los delegados que comunicaran en voz alta el mandato que traían de sus juntas municipales. Un total de 28 delegados confirmaron que los afiliados les habían encargado votar a Allende y otros 28, a Gerenabarrena. Este recuento público de las posiciones de las juntas municipales, que no coincidió con la votación, fue incluido en el acta de la asamblea.
Allende fue el claro ganador en Álava de la primera vuelta del complicado proceso electoral interno del PNV. Tras la segunda vuelta, en la que las juntas municipales vuelven a votar a los dos candidatos que pasan la criba de la primera, los candidatos llegaron a la asamblea regional igualados. Este hecho hace aumentar las sospechas de que el proceso ha podido sufrir alteraciones y que los afiliados sufrieron presiones para que cambiaran el sentido de sus mandatos.
Allende evitó ayer hacer declaraciones públicas. Varios miembros de su equipo confirmaron a este periódico que no aceptan los resultados de la asamblea "porque han pervertido la democracia interna".
La ejecutiva nacional del PNV (el EBB) estudiará hoy, posiblemente fuera del orden del día, la documentación que se le va a aportar desde Álava: el acta de la reunión y las protestas de los delegados y participantes en la asamblea, así como las declaraciones posteriores de Gerenabarrena, quien reconoció tras su reelección que hubo "tres votos mal orientados" de otros tantos delegados que, a pesar del mandato de los afiliados, "digamos que se han confundido".
"El EBB va a tener información pormenorizada", declaró ayer un miembro del equipo de Manuel Allende. En la asamblea del sábado, dos delegados pidieron expresamente que se impugnara el proceso electoral.
El resultado de la reunión del sábado refleja el ambiente de división que viven los cargos internos del PNV de Álava, la provincia más afectada por el giro estratégico del partido, que le ha llevado a perder el poder en las instituciones públicas y en la principal institución financiera provincial, la Caja Vital. Aunque ninguno de los dos candidatos cuestiona la política aprobada por el partido en su asamblea de enero, en la que confirmó que abandonaba el autonomismo para adentrarse en el soberanismo, Allende cree que las formas se pueden moderar.
Representante francés
Tras los nombramientos del sábado, la ejecutiva nacional del PNV está completa y en el máximo órgano nacionalista hay representantes del País Vasco, Navarra y el País Vasco francés. La reunión del EBB de hoy contará por primera vez de manera formal y permanente con Iñaki Ibarloza, un representante del PNV en las provincias vascofrancesas. Ibarloza superó en el proceso electoral interno a Ramontxu Camblong. Los tribunales franceses consideraron ilegal la financiación desde el PNV en España de su organización en Francia.
EA cree preciso hablar con ETA
La presidenta de Eusko Alkartasuna (EA), Begoña Errazti, rechazó ayer comentar la existencia de una hipotética negociación entre PNV y ETA para declarar una nueva tregua, aunque sí se mostró favorable a que persistan este tipo de conversaciones "mientras no se resuelva el problema". Errazti aludió a la información que ayer publicó El Mundo, según la cual el Gobierno central está convencido de que PNV y ETA negocian un nuevo alto el fuego para el mes de octubre, y dijo: "Estamos en una situación que exige diálogo y en la que es necesario aclarar las cosas". "Conversaciones con ETA ha habido y habrá en tanto en cuanto no se solucione el problema", agregó la presidenta de EA, quien pidió que no se utilicen argumentos "falsos" y advirtió a la banda armada de que "la negociación debe estar en el marco de los partidos políticos". "Estamos en una situación que exige diálogo y, por tanto, hay que tenerlo con todos", apuntó.
