Una protesta de 'okupas' por el precio de los pisos colapsa el centro de Barcelona
Los manifestantes rompen cristales y hacen pintadas en comercios
Más de un millar de okupas, algunos con el rostro cubierto, se manifestaron en la tarde de ayer por las calles de Barcelona realizando pintadas a su paso, quemando banderas y causando roturas de cristales. La manifestación, que recorrió una parte del centro de la ciudad, colapsó el tráfico durante dos horas. Los manifestantes portaban pancartas en las que se leían lemas contra la especulación inmobiliaria y los desalojos de viviendas. La manifestación llegó hasta el monumento a Colón, donde se encerraron media docena de jóvenes.
La manifestación empezó sobre las cinco de la tarde, cuando los jóvenes se concentraron en la plaza de la Universitat de Barcelona, donde permanecieron una hora. Después iniciaron su marcha por la calle de Aribau y enfilaron la de Aragó, donde quemaron varias banderas en la sede de la Delegación de Hacienda. Los manifestantes colocaron banderas ante este edificio y los bomberos acudieron luego a retirarlas.En su recorrido, los manifestantes pintaron escaparates de bancos y tiendas y rompieron cristales de un edificio abandonado en la plaza de la Universitat. En algunos momentos, fueron increpados por algunos transeúntes. A la altura de la plaza de la Universitat, un okupa cargó contra un transeúnte ebrio que les había increpado.
La manifestación prosiguió luego por la Via Laietana y el paseo de Colom. En el monumento a Colón, seis jóvenes se encerraron en lo alto de la estatua. Allí los jóvenes bloquearon el ascensor de acceso al mirador del monumento y desplegaron una pancarta contra la especulación. Los jóvenes permanecieron en el mirador hasta que otro grupo de manifestantes fue a recogerlos después de media tarde.
La Asamblea de Okupas de Barcelona indicó que la manifestación, cuyo lema era: Stop especulació, tenía como objetivo denunciar que Barcelona "se ha convertido en la ciudad europea donde más se especula" en el mercado inmobiliario. Los manifestantes repartieron propaganda en la que afirmaban: "Más de una docena de casas y/o centros sociales okupados están amenazados con sentencias judiciales de desalojo". La asamblea okupa considera que los desalojos son "consecuencia" de la "brutal especulación que sufrimos todos y todas".
