La Generalitat quintuplica el presupuesto de ayudas familiares
La Generalitat destinará 2.200 millones de pesetas, 1.800 más que el año pasado, a potenciar la creación y consolidación de la familia. Irene Rigau, consejera de Bienestar Social, y Joan Vallvé, secretario general de la Familia, anunciaron ayer ayudas de 60.000 pesetas anuales para las familias con un segundo o un tercer hijo de hasta tres años que perciban una renta anual no superior a 3,5 millones, además de una ayuda fiscal de 50.000 pesetas para las familias con uno o varios hijos en las que nazca alguno más.
Hasta ahora las ayudas familiares que concedía la Generalitat eran de 55.000 pesetas anuales, sólo para familias con niños de entre dos y tres años y con unos ingresos anuales no superiores a 2,4 millones de pesetas.Rigau indicó: "La familia es una institución de la que esperamos mucho pero a la que hemos dejado muy abandonada", y destacó que uno de los objetivos principales del aumento presupuestario es "la conciliación de la vida laboral con las responsabilidades familiares". La consejera adelantó que la convocatoria de las ayudas se publicará en el Diari Oficial de la Generalitat (DOG) a finales de abril o principios de mayo, y desde entonces hasta el 30 de junio se abrirá un plazo para que las familias interesadas presenten sus solicitudes.
Asimismo destacó la importancia de que la información llegue a los posibles destinatarios de las ayudas, ya que "muchas veces es sólo cuestión de conocerlas". En este sentido apuntó que todas las oficinas de Bienestar Social informarán de las ayudas y atenderán cualquier duda al respecto.
Familias numerosas
Respecto a la ley de protección de las familias numerosas, Vallvé declaró que es "una vergüenza" que sea del año 1971, aunque reconoció la importancia de la modificación que las considera así a partir de tres hijos, en lugar de cuatro, y añadió que la Generalitat presentará una nueva normativa para modificar la ley, "que no responde a las necesidades actuales en aspectos como la enseñanza, el coste del transporte o el recibo del agua".
Como líneas de actuación concretas para conciliar la vida laboral con las responsabilidades familiares, Vallvé destacó un apoyo especial a las empresas familiares rurales, así como incentivos a la formación de jóvenes agricultores. Facilitar la reincorporación al mundo laboral de las mujeres que se hayan dedicado al cuidado de los hijos u otros familiares y la flexibilización de la jornada laboral para favorecer la relación entre padres e hijos son otras de las actuaciones previstas. La secretaría, explicó Vallvé, también pretende impulsar la renovación de la ley de mediación familiar para evitar la violencia doméstica.
Vallvé aclaró que las ayudas previstas no sólo van destinadas a los núcleos que conformen una típica unidad familiar, sino que muchas de ellas incluyen también a las parejas de hecho. En este sentido, Rigau anunció que tienen previsto reunirse próximamamente con representantes del colectivo homosexual para atender sus demandas.
El secretario general concluyó que "la familia es el primer núcelo social de la persona" y recordó que "los jóvenes son los que garantizan las pensiones del futuro". Y también aprovechó la ocasión para hablar del programa Vivir en familia, iniciado el año pasado y del que, según Vallvé, se beneficiaron 5.500 familas. El programa está destinado a las unidades familiares que acogen a personas con dificultades especiales y prevé proporcionar asistencia a los discapacitados, ayuda psíquica y asesoramiento a sus familias, y recursos económicos para realizar las transformaciones necesarias en el hogar de manera que la persona con dificultades no se vea obligada a ir a una residencia.
