Las estatuillas viajarán en avión
Las investigaciones del departamento de arte del FBI y de la Policía de Los Ángeles continuaban ayer detrás de los misteriosos ladrones de oscars. Las 10 cajas con 55 estatuillas -de 35 centímetros de altura y cuatro kilos de peso cada una - que desaparecieron de un gigantesco muelle de Los Ángeles en la madrugada del viernes siguen sin aparecer y de momento se ha ofrecido una recompensa de 8,5 millones de pesetas a quien encuentre un solución o una pista que resuelva la sorprendente desaparición.La Academia insistió en lo inútil del robo. Según la policía, a los ladrones les será practicamente imposible vender los 55 trofeos, que al estar sin firmar ni siquiera podrán interesar a los coleccionistas y cuyo valor económico es de 18.000 dólares. Los ladrones, según la policía, debieron confudir las cajas con las de ordenadores o repuestos de coche.
Mientras tanto, los nuevos Oscar (35 que se sumarán a otros 20 que sobraron de la gala del año pasado) ya están pasando por los sucesivos baños de níquel, plata y oro en la fábrica de Chicago que tradicionalmente los elabora y que los tendrá listos antes del próximo viernes. La Academia sólo tiene claro que esta vez las estatuillas no viajarán por tierra con la empresa de camiones Roadway, a la que indirectamente responsabilizan de lo ocurrido ya que ellos fueron los últimos que tuvieron las cajas en sus manos. "Los Oscar viajarán en avión y con un equipo de seguridad especial", afirmó Bruce Davis, director ejecutivo de la Academia.
Entre pesquisas y sin perder el buen humor ayer se recordaban frases dedicadas a lo largo de la historia a la figurilla, como el comentario que Dustin Hoffman hizo al recibir una por segunda vez: "¿Se han fijado ustedes?, el Oscar no tiene sexo y en su lugar lleva una espada".