Segundo sabotaje contra el parque eólico de Elgea desde el inicio de las obras
El incendio el sábado de varias aspas de generadores de aire destinadas al parque eólico de la sierra de Elgea constituye el segundo ataque a esta instalación, sin que la Ertzaintza sepa aún si encuadrarlo dentro de la kale borroka. La empresa que construye y explotará el parque, Eólicas de Euskadi -participada al 50% por el Ente Vasco de la Energía (EVE), el Gobierno vasco e Iberdrola- guarda también cautela sobre el particular. El parque inició su construcción con la oposición del Ayuntamiento de Eskoriatza, gobernado por EH, el único de los cinco municipios afectados que denegó la licencia de obras. Las seis aspas, de 22 metros y 1.600 kilogramos de peso cada una, resultaron destruidas en un incendio deliberado, según los bomberos, que fue provocado por desconocidos en el camión que las contenía. Éste estaba aparcado desde la víspera en una explanada cercana a la N-1, en Barrundia, a 12 kilómetros del parque. La empresa fabricante de las aspas, Gamesa Eólica, presentó una denuncia ante la Ertzaintza, no así Eólicas de Euskadi,que no se considera parte afectada, ya que el material fue destruido antes de su entrega y le fue repuesto de inmediato por la empresa suministradora. Eólicas calificó de "lamentable" lo ocurrido.
El Partido Popular se apresuró ayer a pedir al consejero de Interior que precise a cuánto ascienden las pérdidas y si a su juicio cabe atribuir este ataque "a la violencia callejera practicada por la izquierda abertzale" . También pregunta a Balza si ordenará poner en marcha algún dispositivo especial de vigilancia durante la construcción del parque. En julio del año pasado un grupo de ecologistas radicales arrancó marcas topográficas y pinchó ruedas de vehículos y maquinaria pesada, que cruzó en los accesos.
