El Ararteko termina su mandato sin que los partidos hayan pactado su relevo
El ararteko, Xabier Markiegi, finaliza hoy su mandato sin que los partidos hayan pactado su relevo o continuidad. La consecuencia inmediata es que el Defensor del Pueblo vasco seguirá ejerciendo en funciones durante seis meses, hasta el próximo 10 de septiembre. Si para esa fecha los partidos no han acordado que siga otro mandato o han elegido a su sustituto, la adjunta al Ararteko, Merche Agúndez, se hará cargo del puesto. La elección del Defensor del Pueblo vasco exige un amplio consenso de los partidos, ya que la ley obliga a que al menos 45 parlamentarios de los 75 que componen la Cámara deben respaldar la candidatura que se presente. Así, el acuerdo debe realizarse a varias bandas, ya que ni los partidos nacionalistas, por un lado, ni los no nacionalistas, por el otro, disponen de los votos suficientes. De momento, el debate ni siquiera se ha planteado entre los grupos, aunque algunos de sus representantes han aplaudido la gestión desarrollada por Xabier Markiegi durante los últimos cinco años, desde que accedió al cargo en marzo de 1995.
La campaña electoral y la tensión que vive la política vasca en las últimas fechas no ayudan a que los partidos se sienten a hablar y terminen con un acuerdo sobre el candidato más idóneo, según expuso el representante de un partido. De momento, sólo UA ha dicho claramente que votará a favor de Markiegi si éste anuncia su deseo de continuar un mandato más.
Diplomático y conciliador
Xabier Markiegi fue designado ararteko el 3 de marzo de 1995 por el pleno del Parlamento vasco en sustitución de Juan San Martín. PNV, PSE, IU y UA le apoyaron atendiendo su talante diplomático y conciliador mientras desempeñó su trabajo como parlamentario vasco de la extinta Euskadiko Ezkerra. La candidatura fue impulsada en primera instancia por el Partido Socialista y posteriormente aceptada por el PNV, que en ese momento era socio de los socialistas en el Gobierno vasco. Tras abrir negociaciones a varias bandas, IU y UA también se sumaron al acuerdo, mientras que el PP votó en blanco porque no llegó a ningún acuerdo para designar al adjunto al Ararteko. Por su parte, EA y HB votaron en blanco porque no sabía hablar en euskera.
Markiegi fue parlamentario de Euskadiko Ezkerra durante las cuatro legislaturas anteriores a acceder al cargo de Ararteko y tras la escisión del partido se mantuvo como independiente en el Grupo Mixto.
Uno de los informes más sonados durante su mandato como Ararteko fue el de las prisiones vascas, en el que acusaba a la Administración de incumplir la legislación en las cárceles. Markiegi describió en el trabajo el hacinamiento, los problemas de droga y las dificultades de relación con sus familias que sufren los presos. Entre sus recomendaciones, el Ararteko solicitaba el acercamiento de los reclusos a sus lugares de residencia.
