Israelíes y palestinos reanudarán las negociaciones este mes en Washington
Las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos, bloqueadas desde hace varias semanas, se reanudarán antes de que finalice este mes de marzo en Washington. La celebración de esta enésima cumbre fue anunciada ayer por el emisario de la Casa Blanca para Oriente Próximo, Dennis Ross, en Ramalá, al finalizar una entrevista entre el presidente palestino, Yasir Arafat, y el primer ministro israelí, Ehud Barak, la segunda en poco menos de un día. Apenas cuatro horas divididas en dos sesiones fueron suficientes para que Arafat y Barak desatascaran el diálogo.
"Las partes han hecho progresos en el intento de resolver muchos de los problemas pendientes y han acordado intensificar sus negociaciones", aseguró Ross al concluir la cita de los dos líderes, a la que asistió como observador y consejero, y de la que surgió el compromiso de volver a reunirse en Washington antes del fin de marzo. La cumbre se efectuará una vez transcurridas la fiesta musulmana del sacrificio (Eid al Adha), del 16 al 19. La fecha exacta de la cita no ha podido aún ser fijada porque después, entre el 21 y el 26, el papa Juan Pablo II inicia su visita a Tierra Santa, donde se entrevistará con Arafat y Barak.
La cumbre de Washington tiene como principal objetivo intentar que israelíes y palestinos puedan cumplir sus compromisos de alcanzar un acuerdo sobre el Estatuto Final antes del 13 de septiembre, lo que incluye negociar y solventar temas tan difíciles como el futuro de Jerusalén, los refugiados, el agua o los asentamientos judíos en los territorios autónomos palestinos. Para poder culminar con éxito este acuerdo, las dos partes tratarán de tener estructurado antes del mes de mayo el tan traído y llevado "acuerdo marco", que lleva ya 90 días de retraso.
Pero, al margen de este compromiso, Arafat y Barak concluyeron ayer una serie de pactos concretos e inmediatos, que harán públicos hoy en la localidad egipcia de Sharm el Sheij, donde se reunirán con el presidente Hosni Mubarak, en una deferencia por los esfuerzos que el presidente egipcio ha efectuado en los últimos meses en favor del proceso de paz entre israelíes y palestinos. Entre los avances destaca el repliegue inmediato de las tropas hebreas en un 6,1% de Cisjordania, una cuestión pendiente y espinosa que ha venido entorpeciendo el proceso de paz en su conjunto. Esta medida se complementa con la liberación de un nuevo grupo de prisioneros políticos palestinos, el establecimiento de un segundo corredor entre Gaza y Cisjordania y el desbloqueo de centenares de millones de dólares recaudados por Israel en nombre de la Administración palestina, en concepto de tasas. Pero además, Barak y Arafat se han comprometido a un nuevo repliegue de las tropas israelíes en Cisjordania antes de junio. "Éste es el momento de la verdad, Israel debería dejar de perder tiempo jugando con el acuerdo. No tenemos mucho tiempo. Tenemos que aplicar los acuerdos", aseguraba ayer Arafat, dejando de lado las amenazas de declarar de manera unilateral el Estado de Palestina el 13 de septiembre próximo. Ayer, el presidente parecía haber reflexionado y llegado a la conclusión de que es más rentable políticamente hacerlo en el marco de un acuerdo con Israel y no en virtud de un enfrentamiento.
