Putin nombra un 'defensor' de los chechenos tras las protestas exteriores
Serguéi Yastrzhembski, el portavoz del presidente ruso para Chechenia, desmintió ayer categóricamente que las fuerzas de Moscú hayan torturado, violado o ejecutado a civiles en el campo de internamiento de Chernokózovo. Yastrzhembski dijo que el reportaje de Sophie Shilab en Le Monde, reproducido anteayer en EL PAÍS, es completamente falso. Según el portavoz ruso, en Chernokózovo, por donde han pasado al menos 800 personas, no se tortura, no hay niños y sólo hay 16 mujeres.Sin embargo, el testimonio recogido por Shilab no es el único que denuncia torturas, y ante la ola de protestas sobre los abusos cometidos por los rusos, Putin nombró ayer a Vladímir Kalámanov, "responsable de hacer respetar los derechos humanos y las libertades en Chechenia".
Mientras, Shamil Basáyev, el guerrillero checheno por quien los generales rusos han ofrecido un millón de dólares (170 millones de pesetas) de recompensa, ha puesto, a su vez, precio a la cabeza de Vladímir Putin, el presidente interino de Rusia.
