_
_
_
_
_

El director de Correos encargó un informe para avalar su papel en el contrato a favor de un ex socio

El director general de Correos, José Ramón Esteruelas, aseguró el 11 de noviembre que se inhibió de todas las gestiones y negociaciones para alquilar la nueva sede del organismo, dependiente del Ministerio de Fomento, a una empresa de Santos Montoro, ex socio suyo y de Rafael Arias-Salgado. El pasado lunes, Esteruelas cambió la versión en el Congreso y aseguró que no se abstuvo porque no era necesario, según un informe jurídico de Correos. Dicho informe, encargado por él, está fechado el pasado viernes, 18 meses después de que Esteruelas adjudicara el contrato a su ex socio. Sin concurso, y sin inhibirse.

Más información
"El documento no existe"
El PSOE denuncia que el alto cargo del PP incumple dos leyes

El máximo responsable de Correos no termina de aclarar su polémica actuación al contratar el alquiler de la nueva sede del organismo en Madrid a la empresa Monthisa, propiedad del empresario Santos Montoro. Este promotor inmobiliario ha compartido negocios de alquiler de apartamentos en Mallorca tanto con Esteruelas como con el propio Arias Salgado entre 1983 y 1991. Montoro mantuvo sus relaciones empresariales con Esteruelas hasta septiembre de 1996 a través de la empresa Falster. Ese mismo mes, Arias-Salgado nombró a Esteruelas director general de Correos y éste dejó su puesto de consejero en Falster, aunque tardó un año más en vender las acciones, que figuraban a nombre de su esposa.Diez meses después de hacerse cargo de Correos, Esteruelas inició las gestiones para buscar, fuera mediante compra o alquiler, una nueva sede para el organismo porque la actual, en el centro de Madrid, se había quedado pequeña. Para ello, contactó con diversos organismos estatales y buscó y recibió ofertas privadas desde julio de 1997, el mismo mes en que Monthisa, la empresa de Santos Montoro, conseguía un solar en el Campo de las Naciones para construir un edificio de oficinas.

En mayo de 1998, ese terreno fue elegido por el Consejo de Administración de Correos como nueva sede del organismo a partir del 2000. El precio del alquiler: 546 millones anuales con una opción de compra a los cinco años. Tras la publicación por este periódico de las antiguas relaciones empresariales entre el adjudicatario (Montoro) y el encargado de la adjudicación (Esteruelas), el director general de Correos se defendió con una nota interna en la que explicaba que se había inhibido en las gestiones y negociaciones para adjudicar el alquiler de la nueva sede. Idéntica respuesta dio a este diario para justificar que no había incurrido en ilegalidad alguna.

Pero, diez días después, en su comparecencia ante el Congreso, Esteruelas cambió su versión y explicó que no se había inhibido porque no hacía falta. Para justificar su no abstención exhibió un informe jurídico elaborado por la "abogacía del Estado de Correos". Sin embargo, el informe esgrimido en su descargo no se realizó antes de la firma del contrato, sino 18 meses después. El escrito lleva fecha del viernes pasado. Además, Correos no tiene abogacía del Estado. El informe lo firmó el jefe de la asesoría jurídica de Correos, Juan Carlos Alfonso Rubio, un contratado de Esteruelas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_