El general golpista de Pakistán anuncia una junta cívico-militar y la distensión con India
En su segundo mensaje al país tras el golpe militar del pasado martes, el general Pervez Musharraf, jefe del Ejército y nuevo hombre fuerte de Pakistán, anunció ayer la creación de un Consejo Nacional de Seguridad, integrado por él mismo y los jefes de la Armada y la Fuerza Aérea, así como por tecnócratas civiles. Musharraf, que también adelantó "un repliegue militar unilateral" paquistaní en la frontera con India, afirmó: "Las Fuerzas Armadas no tienen la intención de permanecer en el poder más tiempo del absolutamente necesario". Pero no fijó ningún plazo.
El general Pervez Musharraf se comprometió a llevar al país a "una democracia real", pero no dijo cuándo. Y esto se lo recriminaron inmediatamente desde Estados Unidos, Reino Unido y la Commonwealth, asociación a la que pertenece la excolonia británica. James Rubin, el portavoz del Departamento de Estado de EEUU, instó a Musharraf a fijar "un calendario claro para la restauración del orden constitucional, con un gobierno democrático formado por civiles". La secretaria de Estado, Madeleine Albright, en unas breves declaraciones a la CNN realizadas poco antes del discurso del general, fijó la misma línea a seguir: "Lo que queremos ver es que el señor Musharraf adopta los pasos necesarios para volver a un sistema constitucional que permita las libertades civiles y que haga algo con la preocupante situación económica y la corrupción que hay en Pakistán", dijo.El ministro británico de Exteriores, Robin Cook, calificó de "decepcionante" el discurso del nuevo hombre fuerte de la antiguacolonia, precisamente porque no contempla un calendario para la reinstauración de la democracia en el país.
Como "jefe ejecutivo" de Pakistán tras el golpe incruento del pasado día 12, el general Musharraf prometió la reinstauración de la democracia después de haber sacado al país "de la era de oscuridad" en la que, según dijo, se hallaba sumido bajo el despótico mandato del depuesto primer ministro, Nawaz Sharif.
"En los últimos años, Pakistán ha vivido bajo bajo una simple apariencia de democracia", afirmó Musharraf en un discurso a la nación transmitido por radio y televisión. "Nuestro pueblo nunca pudo emanciparse del yugo del despotismo", remachó. "No permitiré que el pueblo caiga de nuevo en otra era de falsa democracia. Prometo que traeré una verdadera democracia. Inch alá (Dios lo quiera)".
El jefe del Ejército anunció la constitución de un Consejo Nacional de Seguridad que dirigirá el país, integrado por él mismo, el jefe de la Armada y del Ejérciro del Aire, así como civiles "especialistas" en cuestiones legales y financieras y en política exterior e interior. Un Gabinete ejecutivo, que funcionará bajo la supervisión del Consejo, será también creado para reconstruir la economía y devolver a la confianza a los inversores extranjeros.
El general Musharraf anunció también un "repliegue militar unilateral" paquistaní a lo largo de la frontera con India, para que sirva como "medida de confianza" con el país vecino, con el que ha mantenido tres guerras desde que ambas naciones -potencias nucleares reconocidas- se independizaron de la Corona británica. Los enfrentamientos registrados el pasado verano en la disputada región de Cachemira estuvieron a punto de desatar un nuevo conflicto bélico.
El jefe del Ejército anunció que las tropas paquistaníes desplegadas en la frontera "en un reciente pasado" van a ser retiradas, en una alusión a las unidades que reforzaron la vigilancia de la Línea de Control en Cachemira.
Musharraf aprovechó su discurso para felicitar al primer ministro indio, Atal Behari Vajpayee, por su reciente victoria electoral y le invitó a abrir conversaciones "eficaces" para lograr una solución real en la disputa de Cachemira. "Nuestro deseo", aseguró, "es que la situación permanezca en calma en las frontera con India y en la Línea de Control".
