La Generalitat, la gran ausente
"Barcelona es la única ciudad europea que no cuenta con el apoyo, como accionista o como inversor, de su gobierno autónomo, la Generalitat", destacan medios de Emeca. El mundo ferial de la UE presencia con estupefacción la pasividad del Ejecutivo catalán. Hasta ahora, la Generalitat se ha mantenido al margen de la Fira de Barcelona porque no podía neutralizar la hegemonía municipal de la institución, basada en el hecho de que el Ayuntamiento de Barcelona es el propietario de los solares del recinto tradicional de Montjuïc. Sin embargo, el escenario podría transformarse cuando el nuevo recinto de Montjuïc 2 pase a encabezar la actividad ferial de Cataluña. Fira 2000, la empresa propietaria de Montjuïc 2, controlada por la Cámara de Comercio, ha invitado a participar en el accionariado a las administraciones implicadas. Los ayuntamientos de Barcelona y L"Hospitalet entrarán en el capital de Fira 2000 con 1.000 millones de pesetas cada uno. La Generalitat responde con el silencio. El desarrollo institucional de Fira de Barcelona ha intentado, sin gran éxito, seguir las pautas de las ciudades alemanas de Francfort y Múnich. Los gobiernos de los lander respectivos, el Palatinado y Baviera, están estrechamente vinculados a sus proyectos feriales. El Gobierno de Baviera ha asumido un alto porcentaje del coste de la ampliación de la feria de Múnich, de 150.000 millones de pesetas. Montjuïc 2 costará un máximo de 35.000 millones.
