Rueda de prensa en solitario
El Gobierno israelí comunicó, pocas horas antes de su celebración, la suspensión de la conferencia de prensa conjunta entre Barak y Aznar alegando motivos religiosos. La presidencia israelí descubrió de pronto que era la festividad de Tishá be Av (día de las lamentaciones).La comunidad judía recuerda en esta fecha la destrucción de los dos templos de Jerusalén y otras desgracias como la expulsión de los judíos de España en 1492.
La celebración de esta fiesta, que paraliza la vida de Israel, comenzó a la caída del sol del pasado miércoles con un ayuno que también impidió que Barak ofreciera un almuerzo al presidente español. Otras fuentes indicaron que el motivo real de la suspensión fue el nulo interés del primer ministro israelí, 24 horas después de regresar de Estados Unidos, por comparecer ante la prensa en Jerusalén junto a José María Aznar.
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