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Un pacto amenaza con arrebatar al PP la alcaldía de Llavaneres

El Partido Popular perderá con toda probabilidad la alcaldía más importante que tenía hasta ahora en Cataluña, su buque insignia: Sant Andreu de Llavaneres en el Maresme, una localidad de clases acomodadas. Los populares, cuyo líder es Víctor Ros, presidente comarcal del partido y diputado en el Parlament de Catalunya, consiguieron ser la lista más votada, pero empataron a cinco concejales con Convergència i Unió (CiU). El grupo de independientes Gent de Llavaneres, con dos representantes, ha decidido apoyar a CiU. Los socialistas se han quedado con un concejal. El alcaldable de la coalición nacionalista, Josep Ferrer, asegura que intentarán formar un gobierno municipal estable y reconoció que tienen "muchas posibilidades" de llegar a un acuerdo con los independientes Gent de Llavaneres. Ferrer considera que hay que cambiar el estilo de gobernar la localidad para dar un impulso a la población, que según afirma "ha quedado estancada". Los independientes han manifestado reiteradamente su intención de apoyar a CiU para arrebatar la alcaldía al Partido Popular y el miércoles por la noche lo refrendaron en una asamblea con los miembros de la formación. El número uno de la candidatura independiente, Joan Mora, ya anunció que el próximo 3 de julio, día de la constitución de los ayuntamientos, su grupo municipal votará a favor del candidato de CiU, "aunque no haya un acuerdo para gobernar". Mora justificó el voto de los dos concejales independientes favorable a los nacionalistas ante la necesidad de fomentar "un cambio al frente del consistorio". Apoyo incondicional La Agrupació d"Independents Gent de Llavaneres (AIGLL) creó una comisión que será la encargada de negociar un posible pacto con CiU. De momento, ambas formaciones se reunirán hoy para sentar las bases de un posible pacto entre las dos candidaturas. Aunque CiU pretende conseguir un gobierno estable y formalizar un pacto, los independientes, que están bien predispuestos, han anunciado que si no hay acuerdo no será un escollo para dar su voto a los nacionalistas. Sólo un posible pacto entre el PP y CiU permitiría que la alcaldía de Llavaneres siguiera en manos del partido conservador, posibilidad que los representantes de la coalición nacionalista no descartan, pero tampoco consideran viable. El Partido Popular accedió a la alcaldía de Sant Andreu de Llavaneres en el año 1987 gracias a un pacto con Convergència i Unió que dejó en la oposición a una agrupación de independientes que habían sido los más votados. En el año 1991, los populares gobernaron con mayoría absoluta y en la pasada legislatura lo hicieron con mayoría simple.

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