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Ruiz-Gallardón 'suspende' al alcalde el nuevo barrio de Arroyo del Fresno

La comisión regional de Urbanismo, donde el Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón (PP) tiene mayoría, ha puesto 13 condiciones al Ayuntamiento de Madrid para que pueda promover el nuevo barrio de Arroyo del Fresno (2.742 viviendas entre Mirasierra y el monte de El Pardo), situado en el noroeste de la ciudad.En las conclusiones del informe, los técnicos regionales apuntan que el Programa de Actuación Urbanística (PAU) presentado por el gobierno municipal de Madrid "no cumple con las condiciones" que le impuso la Comunidad en 1997, cuando se aprobó el nuevo Plan General de Ordenación Urbana.

El ensanche residencial de Arroyo del Fresno es una antigua ilusión del gobierno municipal del alcalde José María Álvarez del Manzano, que los socialistas bloquearon hasta que perdieron las elecciones autonómicas. Los políticos del PSOE se oponían por el impacto que ocasionaría levantar miles de viviendas en un entorno próximo al monte de El Pardo. El Ejecutivo autonómico de Ruiz-Gallardón aceptó por fin los planes residenciales del alcalde, aunque rebajó la edificabilidad de manera que se pudieran construir 300 viviendas menos que las proyectadas inicialmente por el Ayuntamiento de Madrid. Para dar vía libre al barrio, la Comunidad puso una serie de condiciones que el municipio incumplió.

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El barrio de Arroyo del Fresno deberá tener una nueva depuradora

VIENE DE LA PÁGINA 1Entre las 13 condiciones que impone la Comunidad de Madrid en el nuevo barrio de Arroyo del Fresno se cuenta, por ejemplo, la de construir una depuradora. También se deberá "garantizar la protección del cauce del arroyo del Fresno", que da nombre al barrio. Asimismo, el Ayuntamiento deberá garantizar que sean los promotores del nuevo barrio los que se encarguen de financiar las redes de abastecimiento de agua y la eliminación de los torres de alta tensión que cruzan el ensanche.

También tendrá que aceptar el Ayuntamiento todas las condiciones impuestas por la Consejería de Medio Ambiente y deberá respetar "las distancias mínimas desde las viviendas a las carreteras", que ahora, según la Comunidad de Madrid, no se garantizan en el proyecto presentado por el Ayuntamiento.

Se tendrán que variar también las conexiones previstas entre el nuevo barrio y la M-40. La Comunidad de Madrid obliga a que éstas se conecten mediante un carril lateral o un cuarto carril. La Comunidad de Madrid también obliga a que el Ayuntamiento garantice el completo enterramiento de las líneas de alta tensión que crucen el barrio. Otra de las condiciones impuestas por el Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón al alcalde de Madrid es la de un plan especial para desarrollar el campo de golf previsto.

"Intolerable"

El concejal socialista José María de la Riva calificó este hecho ayer de "intolerable". "Es un claro ejemplo de cómo estos señores del PP manejan el urbanismo: beneficiando a los privados y aceptando sus reglas. El Ayuntamiento quería colar de rondón un proyecto que era ilegal", explicó el edil, que continuó: "Y Ruiz-Gallardón es lo mismo que Álvarez del Manzano, lo que pasa es que con el truco de quedar como el salvapatrias de la región madrileña, esconde las ganas de dejar claro que el alcalde es su subordinado".

El concejal de Urbanismo, Ignacio del Río, quitó hierro a la controversia: "Las condiciones son meros detalles técnicos; ni siquiera mis especialistas se han alarmado porque no me han comunicado que algo grave pasa". El responsable del urbanismo en la ciudad añadió que en el pleno de julio, "si el PP gana las elecciones" se aprobará el nuevo proyecto con todas las modificaciones impuestas por la Comunidad. "De hecho, a mí ya me consta que el nuevo proyecto está redactado", concluyó.

El consejero de Obras Públicas y Transportes, Luis Eduardo Cortés, manifestó ayer por su parte que está confiado en que el Ayuntamiento "cumplirá todas las condiciones". Cortés matizó que "algunas de las exigencias son ciertamente más importantes que otras". ¿Qué pasará si, a pesar de todo, el municipio se niega a aceptar las condiciones de la Comunidad? El consejero contestó sin precisar: "Ya se verá".

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