El enigma Mallory
El hallazgo del cadáver del alpinista inglés desaparecido en el Everest en 1924 reabre las dudas sobre si alcanzó la cima del mundo.
La leyenda del Everest, la cima del mundo con sus 8.846 metros, añadió ayer un nuevo relato. Una expedición de Estados Unidos en búsqueda de los alpinistas Mallory e Irvine, desaparecidos a unos 8.500 metros de altura el 8 de junio de 1924 en la arista norte del Everest, aseguró haber encontrado el pasado sábado el cadáver de George Mallory a 8.300 metros.Según el grupo estadounidense, el cuerpo sin vida del alpinista inglés llevaba su nombre cosido a la ropa. Después de una ceremonia fúnebre le enterraron de nuevo en las mismas nieves que lo han mantenido oculto durante 75 años. De su compañero, Andrew Irvine, ni rastro.El hallazgo de Mallory reabrió el debate de si fue el primer montañero en pisar la cima del mundo. "Si no encuentran una cámara fotográfica que pueda demostrar que llegó hasta la cumbre, me temo que nunca sabremos lo ocurrido", declaró ayer el neozelandés Edmund Hillary, el conquistador oficial del Everest junto al sherpa Tenzing Norgay, en 1953, 29 años después de la desaparición de Mallory (37 años) e Irvine (22). Chris Bonnington, prestigioso montañero inglés, apuntó: "La llave que puede revelar si Mallory e Irvine consiguieron coronar la cima del Everest radica en su cámara fotográfica. Si alcanzaron la cima, presumiblemente, habían hecho fotos del éxito".
Prueba de ADN
El hallazgo de Mallory creó escepticismo entre las autoridades del Nepal. "No creeremos que sea Mallory hasta que no se efectúe una prueba del ADN", se aseguró desde el Ministerio de Turismo.El hijo de Mallory, John, replicó a las autoridades del Nepal."No veo motivos en negar que sea el cadáver de mi padre," dijo. "No creo que una prueba del ADN aportara la prueba de si hizo cima o no. Mi opinión es que mi padre hizo cumbre a última hora de aquel 8 de junio. La noche se le echó encima y no pudo regresar nunca".
George Leigh Mallory participó en el primer grupo de montañeros que pudo acariciar las laderas del Everest, en 1921, por la vía noroeste, en el Tibet. Mallory fue el primer montañero en señalar que la ascensión era posible. Suya es la famosa frase inmortalizada en los libros del porqué había que escalar el Everest: "¡Porque está ahí!"
En este primer intento sólo se alcanzó los 7.000 metros. En 1924, el inglés Norton llegó a los 8.572 metros sin oxígeno, un récord que permanecería hasta 1978 con la ascensión sin oxígeno de Messner y Habeler.
En el siguiente ataque de la expedición sucedió la tragedia. Mallory e Irvine desaparecieron. Sobre su fin se han escrito muchas páginas, sobre todo acerca de la incógnita de si alcanzaron la cima o no. En 1933, una cordada inglesa encontró, en la cota 8.450 metros, debajo del primer escalón de la arista noroeste, un piolet de madera que sólo pudo haber pertenecido a Mallory o a Irvine. Cabe la posibilidad de que Irvine, el más débil, bajara y se despeñara. ¿Y Mallory? ¿Llegó sólo a la cima? La posible respuesta la tiene ahora una cámara fotográfica.
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