Un alcalde gallego del PP admite irregularidades contables
El alcalde de Riveira y candidato del PP a la Diputación de A Coruña, José Luis Torres Colomer, atribuye a un desfase informático las múltiples irregularidades detectadas por el Consello de Contas de Galicia, equivalente al Tribunal de Cuentas, en la gestión económica del Ayuntamiento, especialmente en el sistema de contrataciones. El propio Consello de Contas, que analizó el ejercicio de 1994, remitió su informe a la Fiscalía Anticorrupción por observar indicios delictivos en algunas de las prácticas habituales en Riveira. El Ayuntamiento carece, a día de hoy, según reconoce Torres Colomer en sus alegaciones al informe, de liquidaciones firmes de los presupuestos de 1993 a 1998, así como de la Cuenta General desde 1992 a 1998. Ello se debe, según el alcalde, "a la tardía implantación del sistema informático", adquirido en 1991, pero que "aún hoy genera problemas", y "a la carencia de funcionarios (...) para los puestos de interventor y tesorero, vacantes desde 1991".
En sus alegaciones a las irregularidades, Torres Colomer admite que un expediente de modificación presupuestaria "está extraviado". Asimismo, reconoce el recurso habitual a la contratación directa por "la posibilidad de preseleccionar tres contratistas de reconocida capacidad y solvencia para la ejecución de la inversión, frente a las dificultades generadas en los procedimientos de subasta...". También indica que un pago extrapresupuestario se debe "a un anticipo al contratista (...) para acopio de materiales".
Torres Colomer, a quien el ministro de Sanidad y barón del PP en A Coruña, José Manuel Romay, designó candidato a la Diputación, atribuyó inicialmente a venganzas procedentes de su partido la filtración de las irregularidades detectadas por el Consello de Contas. Manuel Fraga le amonestó, pero, al igual que Romay, respaldó su gestión.
El PSdeG-PSOE, tras conocer las alegaciones del alcalde, presentó ayer varias iniciativas parlamentarias para aclarar la situación de Riveira. "Esto es un escándalo sólo superable por las declaraciones de Fraga y Romay amparando a Torres Colomer", señaló el diputado socialista Miguel Cortizo.
