Objetivo: batir al cinco veces "número uno"

El Mundial de motociclismo arranca este fin de semana en Malaisia haciéndose las mismas preguntas que en los últimos años. ¿Concluirá esta temporada la hegemonía de Mick Doohan? ¿Y quién va a jubilar al piloto australiano? Los pilotos españoles no son ajenos al dilema: Àlex Crivillé y Carlos Checa figuran en la lista de candidatos. En juego está la corona de 500, y el emocionante interés de la categoría reina empequeñece cada día más a las otras cilindradas. "¡Casarse cuesta un segundo por vuelta, y tener hijos otro más!". Dicen que así advirtió su jefe de mecánicos a Doohan, que tiene ya 33 años. "Por ahora no voy a casarme", ha sido la respuesta del cinco veces campeón del mundo, cuya novia, Selina, espera su primer hijo para agosto. Pero el vaticinio de Jerry Burgess es un argumento que quiere comprobar la manada de lobos que esperan turno para convertirse en número uno.

Ayer, las esperanzas de los delfines recibieron un empujón, pues el rey Doohan sólo pudo ser séptimo y además se cayó en los primeros entrenamientos para el Gran Premio de Malaisia, la prueba inaugural del curso, que se disputa esta madrugada (5.15, La 2 y Eurosport) en el flamante circuito de Sepang, una lujosa instalación que se estrena para la ocasión y que ha costado unos 12.000 millones de pesetas.

La pole position provisional correspondió al estadounidense John Kocinski (Honda), un piloto que aún no tiene patrocinador. La igualdad que se anuncia para este año se reflejó en que tres marcas diferentes ocuparon las tres primeras posiciones, con el italiano Max Biaggi (Yamaha), segundo, y el estadounidense Kenny Roberts (Suzuki), tercero. Por parte española, Crivillé se clasificó quinto, Juan Borja (Honda), noveno; Sete Gibernau (Honda), 13º, y Checa, que se cayó sin sufrir malas consecuencias físicas, 14º.

Doohan, en cualquier caso, es el gran favorito. Ha confesado que su objetivo es batir los récords de Giacomo Agostini, sobre todo el de victorias en grandes premios de 500. El legendario italiano logró 68, y Doohan va ya por 54. "Si me divierto, gano carreras y la cifra de Agostini está a tiro, puede que siga hasta finales del 2000", ha reconocido recientemente por primera vez.

Numerosos rivales

Sin embargo, sus rivales cada día son más numerosos y amenazadores. Los tiene dentro de casa, en el equipo oficial Repsol-Honda, en el que también están Àlex Crivillé, Sete Gibernau y el japonés Tadayuki Okada. "Mi objetivo sólo es el número uno", avisa Crivillé, de 29 años, a pesar de que Doohan siga siendo el principal piloto de Honda y el único que dispone de material preferente.

Yamaha se ha reforzado para romper la actual dictadura y ha fichado para su equipo de fábrica al italiano Max Biaggi, subcampeón el año pasado, y a Carlos Checa, dos ex Honda con ganas de revancha. Ambos parten en igualdad de condiciones. "Estoy muy ilusionado con este nuevo proyecto y estoy seguro que vamos a luchar por ganar carreras", explica el noi de Sant Fruitós, que en octubre cumplirá 27 años.

Suzuki, por su parte, parece dispuesta a reverdecer viejos laureles de la mano de su nuevo recluta Kenny Roberts júnior, sorpresa de la pretemporada. La nómina de inscritos ofrece además otras alternativas, como el brasileño Alex Barros, líder del renovado equipo de Sito Pons, en el que también está el alicantino Juan Borja, o el estadounidense John Kocinski, todos con Honda.

Ahí están también los Luca Cadalora (MuZ), Tetsuya Harada (Aprilia), Simon Crafar (Yamaha), por citar sólo algunos nombres ilustres del mejor conjunto de pilotos de la historia del Mundial. En la parrilla de salida de Malaisia van a alinearse 20 motos oficiales, incluida la experimental máquina neozelandesa BSL. Entre todos los pilotos suman 17 títulos mundiales de todas las categorías, 178 victorias en grandes premios. Es la mejor manera de celebrar un campeonato que el 17 de junio cumplirá 50 años.

El Mundial, por cierto, es esta temporada más mundial, ya que el retorno de Suráfrica al calendario permite que el gran circo visite los cinco continentes. En España se celebran 3 de las 16 carreras (el 9 de mayo en Jerez, el 20 de junio en Montmeló y el 19 de septiembre en el nuevo circuito de Cheste, en Valencia).

Entre los 75 pilotos inscritos para todo el campeonato figuran 12 españoles, la tercera colonia más numerosa tras Italia y Japón. Además de los citados hasta ahora, participan José Luis Cardoso en 500, David García, Alfonso González Nieto y Lucas Oliver en 250, y Emilio Alzamora, Jerónimo Vidal y los hermanos Gelete y Pablo Nieto.

El hijo menor de Ángel Nieto es uno de los pilotos de Derbi en el retorno de las balas rojas al Mundial de 125cc, categoría incierta que dominan los japoneses y los italianos. En 250cc la lucha se presenta más abierta que el año pasado, pues Aprilia sólo tiene a Valentino Rossi, mientras que el campeón Loris Capirossi se ha ido a Honda y las Yamaha regresan con fuerza.

En los entrenamientos de ayer, el italiano Rossi, en 250, y el francés Arnaud Vincent, miembro del equipo que dirige Aspar, en 125, fueron los más rápidos. De los españoles destacó la séptima posición de Emilio Alzamora (Honda), y también la excelente prestación de la nueva Derbi. Su piloto japonés Youichi Ui se clasificó décimo.