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Telecom Italia intenta "blindarse" frente a la OPA hostil de Olivetti

Telecom Italia respondió finalmente ayer con todas las baterías a la OPA hostil formalizada a finales de febrero por Olivetti, su competidora en las telecomunicaciones italianas. Las decisiones tomadas por el consejo de administración, guiado por Franco Bernabé, están destinadas a "lindar" la compañía para hacer infinitamente más difícil la "escalada" de Olivetti. En síntesis, se trata de fusionar Telecom con la filial de telefonía móvil Tim mediante una oferta pública de intercambio de acciones de ambas compañías.

El objetivo es que al final de la operación quede incorporado a Telecom el 100% de las acciones de Tim en vez del 60% actual. Además, Telecom reconvertirá las acciones de ahorro de la compañía -un 29% del total- sin derecho a voto y que no son objeto de la OPA de Olivetti, en acciones ordinarias mediante un complejo sistema de distribución de bonos cotizables en Bolsa.Por último, y con el fin de concentrar en manos del "núcleo estable" y del propio Bernabé un 10% del capital de la compañía (unos 9.000 millones de euros), Telecom se dispone a realizar una operación de recompra de sus propias acciones en Bolsa, ofreciendo por cada una 15 euros, es decir, un 50% más que la oferta de Olivetti. Junto a estas medidas, Bernabé ha propuesto un plan de desarrollo industrial que requerirá una ingente suma de dinero, unos 10.000 millones de euros, para ser desarrollado. Dinero que Telecom piensa encontrar en los mercados financieros mundiales. La contra-OPA de Bernabé, dada a conocer ayer en un larguísimo comunicado difundido por la compañía poco antes de la apertura de la Bolsa de Milán, fue calificado como un plan "puramente financiero" por Roberto Colaninno, consejero delegado de Olivetti y cerebro de la OPA contra Telecom.

Éxito condicionado

De momento, los directivos del antiguo monopolio tienen previsto convocar una asamblea de accionistas a mediados de abril para lograr la aprobación del plan y poner en marcha las medidas, caso de obtener la luz verde. El éxito de la contra-OPA, lo mismo que el de la OPA que estará en pie en abril, está sujeto a la obtención del apoyo al menos del 30% del capital de Telecom. El plan presentado por Bernabé cuenta al menos con el beneplácito de los fondos de pensiones extranjeros, que tienen importantes paquetes accionariales en la empresa italiana. La Bolsa reaccionó con cautela a la contra-OPA, aunque las acciones de Tim se revaluaron. En todo caso, los analistas valoraron positivamente las medidas adoptadas por el consejo de administración de la compañía. Bernabé recibió ayer otra buena noticia, en relación con la batalla Telecom-Olivetti. El ministro italiano de Comunicaciones, Salvatore Cardinale, anunció que el Gobierno ha decidido poner en manos de los abogados del Estado la decisión sobre la venta por parte de Olivetti de Omnitel e Infostrada, segundo operador de telefonía móvil y fija, respectivamente.El éxito de la OPA sobre Telecom lanzada por la compañía en otro tiempo dedicada a la informática está condicionado a la autorización del Gobierno para vender su paquete accionarial en ambas firmas a Mannesman, el socio alemán de Olivetti que, en el caso de Infostrada, pasaría a controlar el 100%.

Si sale adelante el plan industrial de Telecom, la firma prevé una drástica reducción de las tarifas telefónicas -hacia el año 2003- y la venta de todo su patrimonio inmobiliario que no aloje filiales estratégicas. Bernabé proyecta también la venta de otras empresas de la compañía, caso de Sirti Miei y Finsiel.

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