Barça-Valencia, la eliminatoria más fuerte

El resultado del sorteo de los cuartos de final de la Copa del Rey, celebrado ayer, supuso más de un alivio para los dirigentes de algunos clubes, sobre todo para los del Real Madrid y el Atlético. Los equipos madrileños no se enfrentarán entre sí y, además, han eludido en esta oportunidad a rivales como el Barcelona o el Valencia, que deberán encontrarse esta ronda del torneo. El sorteo fue puro, sin que se evitaran previamente coincidencias de fechas y de orden de partidos de equipos de una misma ciudad como Madrid y Barcelona. Las bolas verdes con las que se hicieron los emparejamientos fueron extraídas de una copa, respectivamente, por Miguel Ángel Díaz, presidente del Racing (la del vencedor del Barça-Benidorm y la del Valencia); Clemente Villaverde, gerente del Atlético (las del Racing-Real Madrid); Jesús Barrachina, consejero del Valencia (las del Mallorca-Deportivo); y Manuel Fernández Trigo, gerente del Madrid (las del Atlético-Espanyol).

El presidente del Racing no se recató en mostrar su satisfacción por el resultado. "Estoy loco de contento", señaló, "no sólo por lo económico, sino porque no descarto nada en lo deportivo. Nos ha tocado el mejor equipo en todos los sentidos, pero no vamos a regalar nada. Hay que jugar la eliminatoria". El presidente santanderino confía en que su equipo marque un hito en la historia: alcanzar por primera vez las semifinales de la Copa. Hasta ahora, lo máximo que ha logrado en el torneo ha sido la ronda en que se encuentra ahora. El Celta se encargó hace un par de años de cerrarle el paso a semifinales.

El gerente del Madrid, tras mostrar su agrado por el emparejamiento, aseguró que a estas alturas del torneo ya no hay equipos pequeños, y valoró que el Racing acaba de dejar en la cuneta "al campeonísimo de la Copa por excelencia, el Athletic". La eliminatoria, además, está aderezada con el posible desquite de exjugadores madridistas como Víctor y Amaviscas, en la actualidad en las filas del Racing.

El resultado del sorteo, por otro lado, presupone un cierto contratiempo para el Atlético de Madrid. Se enfrentará al Espanyol en tres ocasiones en 10 días, y las dos primeras de forma seguida. El equipo madrileño recibirá el domingo 14 al conjunto catalán en partido de Liga y, tres días después, en la Copa. Para el gerente del equipo madrileño, la eliminatoria "está muy abierta porque el Espanyol es un equipo que se está mostrando muy entero y fuerte en los últimos partidos".

El consejero del Valencia Jesús Barrachina destacó: "La eliminatoria hay que jugarla, y con el Barcelona más vale hacerlo a dos partidos que a uno solo. Además, el encuentro de vuelta lo disputaremos en nuestro campo, lo que puede ser una ventaja". La pasada temporada, el Barcelona se proclamó campeón de Copa después de eliminar al Valencia en semifinales. De ahí el presentimiento del consejero del Valencia al segurar que, si superan al Barcelona, serán ellos en esta ocasión los campeones. El Barcelona, aunque en el momento del sorteo aún no estaba clasificado, contó en él con un representante, Rodolfo Peris, quien consideró al Valencia como uno de los rivales más difíciles con los que se podía encontrar. Tanto el Mallorca como el Deportivo, la eliminatoria que cierra esta ronda del torneo, no contaron con representantes en el acto del sorteo. Los jugadores del Mallorca esperan repetir, como mínimo, la trayectoria del equipo en la edición anterior, que les llevó a la final. Coinciden en destacar la mejoría que últimamente atraviesa el club gallego y la desventaja que puede suponer que el encuentro de ida se dispute en Palma. Para un exjugador del conjunto balear, Romero, ahora en las filas del Deportivo, la eliminatoria "supone un compromiso difícil".

Sevilla quiere la final

La directiva de la Federación tratará la próxima semana sobre la sede de la final de la Copa, a la que aspira Sevilla. Pretende que el partido se celebre en el estadio Olímpico, actualmente en construcción y que en agosto albergará los campeonatos del mundo de atletismo. La final de la Copa está señalada para el 26 de junio, y se prevé que el estadio olímpico de Sevilla se inaugure el 5 de mayo con un partido de la selección.