_
_
_
_
_
Entrevista:

"La danza contemporánea apenas tiene público en Madrid"

La bailarina de danza contemporánea Paloma Díaz (Madrid, 1969) está encantada porque acaba de ganar el primer premio del XII Certamen Coreográfico de Madrid, que se celebró a primeros de este mes. Gracias a ello va a obtener una beca de dos meses en el centro de danza neoyorquino Movement Research. Esta bailarina y coreógrafa, que aún conserva su acento de Sevilla, donde vivió 15 años y donde se inició en la gimnasia rítmica para luego pasar a la danza, bailó en este concurso una pieza titulada Me da igual, que cuenta en clave de humor la ruptura de una pareja en el transcurso de una cena. Con dotes de actriz desde su infancia, Paloma Díaz obtuvo una beca en 1993 para estudiar año y medio en la escuela Folkwang Hochschule, en la localidad alemana de Essen. "Esa experiencia cambió mi vida. ¡La escuela la dirigía Pina Baus y mis profesores eran bailarines de su compañía!", explica Paloma. El pasado sábado estrenó un espectáculo de danza para niños en la sala Cuarta Pared.PREGUNTA. Explíquenos en qué consiste la pieza Me da igual.

RESPUESTA. Es una pieza de 15 minutos que, a pesar de hablar de la separación de una pareja, tiene humor y cuenta una historia.

P. En la obra usted mezcla la danza y el teatro, ¿no le han criticado por no ceñirse exclusivamente a interpretar danza contemporánea?

R. Para mí la danza y el teatro son dos formas de expresión que uso a la vez; me gusta bailar y contar algo al mismo tiempo. Probablemente se debe a que he estudiado desde pequeñita ambas disciplinas.

P. ¿Cómo define usted la danza contemporánea?

R. Es un medio de expresión. No la concibo como "la sublimación del inconsciente...". El movimiento puro y abstracto no me interesa para nada.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

P. ¿Cómo está el mundo de la danza contemporánea en Madrid?

R. En Madrid, a la danza no se le hace mucho caso. Lo veo bastante normal ya que es muy hermética, está alejada de la vida normal y es para minorías. P. ¿Cómo se podría solucionar este problema?

R. Hay que hacer caso al público e intentar comunicarse con él (cosas que no hacen los bailarines de danza contemporánea). Por otro lado, yo aconsejaría educar a la danza desde niños.

P. ¿Y cómo es el público madrileño?

R. La danza en Madrid apenas tiene público. El público aquí lo forman principalmente la gente de danza y sus amigos. Al final, nos conocemos todos.

P. ¿Qué consejo daría a una persona que quiera estudiar en esta ciudad?

R. Que pruebe todos los estilos de baile. Si es menor de 8 años puede iniciarse en ballet clásico, pero si es más mayor puede apuntarse a cualquier centro de baile.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_