El misterio de la unidad especial de seguridad

El informe confidencial remitido al juzgado por el Ministerio de Defensa destapa un hecho extraño. Las tareas de vigilancia del Cuartel del Rey recaían no sólo en los guardias reales sino también en una misteriosa unidad especial llamada US. Este dato, sobre el que Defensa aclara muy poco en su escrito, ha sido vinculado por la familia del cabo con las declaraciones del forense que aseguran que la bala que mató a Antonio Salinas era blindada. Un armamento que, según la letrada de los parientes, no corresponde a la guardia real. Bajo este hilván, los padres del fallecido han elaborado una teoría explicativa de la muerte. Consideran que Antonio cayó abatido de un tiro en la nuca efectuado por un comando de alguna fuerza especial. Este supuesto grupo se habría dedicado aquella noche del 3 de julio de 1997 a supervisar la seguridad del cuartel dada la proximidad de una reunión de la OTAN en el palacio de El Pardo (el 5 de julio se celebró allí la cumbre de este organismo). En su incursión secreta fueron avistados por el cabo, un soldado experimentado y que había participado en misiones en los Balcanes. El centinela avisó a sus compañeros y luego disparó: un tiro de fogueo, tres de fuego real. Luego, le mataron.Esta hipótesis, que no fue planteada en el recurso presentado ante la Audiencia, carece de validación judicial. Los padres, sin embargo, se niegan a aceptar otra. Como argumento, recuerdan la trayectoria vital de Antonio. Nacido en Andoain (Guipúzcoa) el 24 de noviembre de 1974, el joven tenía un historial militar intachable. Jamás había sido apercibido ni arrestado desde que ingresó en el Ejército como voluntario a los 18 años. Por el contrario, Antonio había sido distinguido con el diploma de honor y la medalla de la OTAN por su labor humanitaria en Mostar durante la guerra de los Balcanes. Y un mes antes de morir fue ascendido a cabo primero.