Madrid concentra el 30% del cupo de permisos laborales para inmigrantes

Madrid es la provincia española en la que más inmigrantes han solicitado, y conseguido, uno de los 28.000 permisos laborales y de residencia reservados este año para extracomunitarios en la convocatoria conocida como cupo o contingente. En Madrid se han presentado 20.000 de las 66.000 peticiones formuladas y se han aceptado 8.415, un 30% del total. Le siguen Barcelona, con 8.662 solicitudes y 4.720 permisos concedidos, y Almería, con 7.083, de las que sólo 2.258 han sido finalmente atendidas.

Los cupos no son la única vía que tiene un inmigrante extracomunitario para regularizar su estancia en España. Pero sí constituyen el mecanismo más eficaz porque, a diferencia del régimen general de obtención de permisos laborales, el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales no puede denegar en su caso la concesión alegando que hay parados españoles en el sector donde aspira a trabajar el inmigrante. De hecho, se aprueban sobre todo para áreas como el servicio doméstico o la agricultura que, por sus penosas condiciones, no son demandadas por desempleados locales. Para solicitarlos sólo hace falta presentar una oferta firme de trabajo.De las 66.000 solicitudes presentadas este año (del 31 de marzo al 30 de junio) se han respondido favorablemente 28.000, se han archivado 5.000 por falta de documentación y se han denegado 23.000 porque Trabajo ha considerado que la oferta de empleo presentada no era creíble. En este último supuesto hay desde contratos fraudulentos hasta algunos que, simplemente, hacían abrigar dudas a las autoridades laborales sobre la solvencia del empleador.

Otros 10.000 inmigrantes han quedado fuera de cupo porque éste se llena por orden de presentación de peticiones y siempre superan las posibilidades. Pero para los procedentes de Chile, Ecuador y Perú y los que tienen familiares directos (padres, hijos o cónyuges) con residencia estable en España existe una segunda oportunidad, ya que gozan de condiciones preferentes que les permiten presentarse al sistema general de obtención de permisos sin que les denieguen la solicitud por el paro autóctono.

El 41%, marroquíes

Por nacionalidades, son los inmigrantes marroquíes los que más solicitudes han presentado este año (un 41%), seguidos de los chinos (12%), los ecuatorianos (7%) y los dominicanos (6%). Pero ésos son datos generales. Cada comunidad autónoma tiene sus peculiaridades. Así, en Madrid hay más peticiones de ecuatorianos (un 18%) que de marroquíes (un 17%) y, sin embargo, en Andalucía predominan claramente las de marroquíes (un 66%) y se da un 5% de senegaleses, con muy escasa presencia en otras comunidades.Por sectores productivos, la foto general muestra que un 44% de las demandas han sido para el servicio doméstico y un 35% para la agricultura y la ganadería. Pero también aquí hay diferencias. En Madrid tres de cada cuatro peticiones son para el servicio doméstico y, en cambio, en Andalucía esa misma demanda se da para el campo.

Este sistema de cupos se aplica desde 1993. Nació para encauzar la llegada de nuevos inmigrantes, pero a lo largo de estos años lo han utilizado sobre todo extranjeros que ya residían en España sin papeles para regularizar su situación. Eso ha llevado a sindicatos y ONG a reivindicar cada año un aumento del número de permisos a conceder.

El subdirector general de Migraciones, Antonio Maceda, considera, sin embargo, que este método se adecúa cada vez más a la finalidad para la que nació, si bien denuncia que a menudo los inmigrantes llegan a España muy poco antes de que se abra el cupo en vez de solicitarlo desde su país, "con lo que pagan a las redes de inmigración ilegal un dinero que podrían ahorrarse".

Para tener acceso a estos permisos, cuyo número fija cada año el Gobierno, sólo hace falta presentar a Trabajo una oferta firme de empleo. Si éste da su visto bueno e Interior no tiene ninguna orden de expulsión, el solicitante debe pedir a las autoridades consulares un visado que le permita residir legalmente en España. Con él obtiene ya un permiso de trabajo y residencia por un año (renovable).

Tradicionalmente, se han producido serios retrasos en la tramitación de los cupos. Pero este año el mecanismo ha sido más ágil. Trabajo asegura que ha dado su contestación en un plazo medio de un mes, al que hay que sumar lo que tarda Exteriores en conceder el visado.