El rector Carles Solà se adhiere al documento reivindicativo de la CRUE
Tal y como había anunciado, Carles Solà, el rector de la UAB, leyó el documento redactado por la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), de la que fue presidente hasta hace pocas fechas, rompiendo así lo que había sido la norma en las recientes inauguraciones académicas de las universidades catalanas, en las que no se había hecho mención de él. Solà cerró el acto de inauguración del curso académico con un discurso eminentemente reivindicativo dirigido a los responsables del Ministerio de Educación y Cultura, pidiendo que se rompa de una vez el corsé de la vieja Ley de Reforma Universitaria (LRU) de 1983, que, en su opinión, sirvió para sacar a la Universidad del franquismo pero ha quedado obsoleta, y reclamó "una nueva regulación universitaria que permita adaptarse al presente y al futuro". Estas reflexiones sobre una nueva regulación, dijo el rector, afectan especialmente a la universidad pública, que soporta la mayor parte de los estudios superiores y de investigación. Concretamente, dijo, 180.000 de los 200.000 universitarios catalanes estudian en centros públicos. El rector de la UAB se refirió también a algunos de los nuevos elementos que han empezado a incidir en el mundo académico, citando "el clima de competitividad instalado, no sólo entre las universidades públicas y privadas, sino también entre las públicas", e ironizando sobre que algunas se anuncien como "las mejores". Entre los proyectos de la UAB destaca la inauguración de la primera fase del nuevo edificio de la Escuela de Doctorado y de Formación Continuada, la rehabilitación de la Casa de Convalescència, dentro del proyecto UAB-Sant Pau, y la construcción de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería.
